El Málaga, sin el dinero de N’Diaye y el Al-Shabab sigue fichando

Parece la historia interminable, pero es un culebrón que al menos en el Málaga dan por ganado y controlado. Es el eterno bucle de Málaga-Al-Shabab, N’Diaye, Ontiveros y Villarreal. Los blanquiazules no han recibido todavía el dinero. Y es que como si se tratara de una cadena, hasta que el club saudí no pague al Villarreal, la pedrea, nada más y nada menos que cuatro millones de euros, no caerá en La Rosaleda. Es ya una historia que casi todo el malaguismo conoce de memoria, pero no se fía. Más si cabe cuando el Al-Shabab hace oídos sordos a la sanción en firme que le impuso la FIFA y sigue fichando. Y no cualquier nombre propio.

Si ya intentó seducir al atacante del Real Madrid, Mariano, el Al-Shabab conseguía firmar al volante colombiano Gustavo Cuéllar. El ex de Flamingo o Al-Hilal entre otros equipos, se convierte en nuevo jugador de este ‘enemigo’ blanquiazul. Pese a que el fichaje se hiciese oficial, la situación de bloqueo sigue vigente. Hasta que no pague los cuatro millones de euros que deben llegar al Málaga no podrá inscribir el equipo saudí. Así lo dice la resolución de la FIFA y es la versión que tranquiliza a la entidad de Martiricos. Más si siguen fichando.

Semanas atrás, Kike Pérez, director general del Málaga CF explicaba como estaba el proceso. «El Al-Shabab no va a poder inscribir jugadores hasta que no paguen. Ya está en el TMS, el sistema que se utiliza para los traspasos. ya está puesto que su periodo de inscripción del 30 de junio al 20 de agosto no podrán inscribir jugadores«, comentó al respecto.

Es más, el fichaje de Gustavo Cuéllar por el Al-Shabab le da más fuerza al Málaga que temía cierta parálisis o más bien renovaciones a los futbolistas ya vigentes en la actual plantilla. Puesto que si no paga lo que debe, no podrá utilizar a sus flamantes refuerzos. El temor que existía en el club era que el Al Shabab prolongara el compromiso de los futbolistas de la pasad plantilla. Es decir no fichar durante estas próximas de ventanas y evitar movimientos de llegadas. El sí de Gustavo Cuellar, en clave malaguista, es una muy buena señal. Básicamente, no podrá utilizarlo si no paga al Málaga lo que debe.

El último fichaje del Al-Shabab, Gustavo Cuéllar junto a Ever Banega en un entrenamiento | Al-Shabab