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Dos futbolistas se vistieron de corto por primera vez esta temporada ayer. La Rosaleda se quedó sin su hat-trick de presentaciones.
Menudo duelo de locura el vivido ayer en Martiricos. El partido fue el fiel reflejo de lo que significa LaLiga ‘Hypertension’ y, afortundamente para los boquerones, se resolvió con una victoria local agónica con penalti polémico incluido. Se está acostumbrando el malaguismo a que la moneda salga cara en los minutos finales. Hubo de todo. Los de Pellicer se quedaron con diez en la primera parte, Alfonso Herrero paró un penalti, Cordero volvió a marcar… y el Málaga remontó un resultado adverso. Entre todos esos hechos que acontecieron ayer, también hay que destacar las caras nuevas. Luismi Sánchez y Sergio Castel pudieron mostrarse ante su nuevo público en un partido de máxima exigencia. El que se quedó con las ganas fue Yanis Rahmani. Así les fue a cada uno.
Cumplida la hora de partido y con uno menos, Sergio Pellicer decidió cementar el centro del campo y darle piernas frescas a la delantera. Por ello, los dos jugadores anteriormente citados salieron en sustitución de Luca Sangalli y Dioni. Luismi Sánchez estuvo excelso. El gaditano cumplió con su principal propósito de ejercer como ‘cortafuegos’ en la sala de máquinas y frenar los avances combinativos del cuadro manchego. Recuperó varios balones importantes mostrando un poderío físico que, si las lesiones se lo permiten, le van a conventir en una pieza importante en los esquemas del entrenador. Contundente sin balón y mostrando mucho criterio con él. Minutos que depositan la confianza necesaria en el ’19’ que su ausencia en pretemporada disiparon. Veremos si parte de inicio en Córdoba.
El propio centrocampista habló una vez que finalizó el duelo: “Jugar aquí como local es increíble. Muy contento. Es el primer paso. Contento por el debut y la victoria”.
Menos vistoso fue el debut de Sergio Castel. El ariete no está en plena forma. La media hora que le vimos sobre el verde fue suficiente para comprobar que aún no tiene el ritmo competitivo del resto de sus compañeros. Ojo, no es que esté pasado de peso ni mucho menos, sino que aún no está al 100%. Salió para ejercer de referencia y ‘bajar’ balones que facilitasen acciones ofensivas a sus compañeros, pero no ganó prácticamente ningún duelo aéreo. Entre las cosas positivas, destacamos su capacidad de ruptura al espacio y, sobre todo, su desempeño en la jugada que termina con el penalti sobre Gabilondo.
Pelea, gana el esférico, recibe una patada y cambia el juego de frente a frente para ofrecer todo el carril diestro al lateral donostiarra. Si es capaz de estar a pleno rendimiento, Sergio Pellicer va a sufrir numerosos quebraderos de cabeza para alinear un solo delantero de los tres disponibles.
La cruz de la moneda fue Yanis. Las circunstacias del partido obligaron al preparador a prescindir de sus servicios en pro de sustituir al recién lesionado Víctor García por Dani Sánchez. Iba a salir, pero se tuvo que cancelar la sustitución. Tras este contratiempo, volvió a calentar junto al resto de sus compañeros y su debut se hará esperar, al menos, una semana más. Esto no servirá más que como un extra de motivación para el franco-argelino que estaba ‘loco’ por salir. La Rosaleda le brindó una sonora ovación cuando saltó a calentar.