La salida de Paulino, alivio y peaje

El santanderino ya es historia. La salida de Paulino del Málaga CF es un alivio en lo deportivo. Él y su entorno sabían que era un descarte y que no iba a tener sitio en esta nueva temporada, pero también tenían la sartén por el mango desde que firmó por la entidad de Martiricos. Un peaje que apenas deja dinero en las arcas. Tras la noticia que adelantó este medio del pago de 50.000 euros por su cláusula de rescisión por parte de Pachuca, la afición montó en cólera.

Paulino fue uno de los primeros fichajes en llegar el pasado verano y el segundo en salir en la presente ventana. De eclosión a erosión en menos de una temporada. Antes de la burbuja CVC y con la vitola de ser el segundo máximo regateador del fútbol español se presentaba en sociedad pese a descender con la UD Logroñés.

Así llegó el extremo que en Logroño hizo un buen papel y que pronto se hizo viral bajo la copla famosa del Rumba. Meses después todo cambiaría. Paulino aterrizó en La Rosaleda pese a tener mejores oportunidades económicas en LaLiga SmartBank y fue ahí donde se incluyó la controvertida e irrisoria cláusula de los 50.000 euros.

Las peculiaridades de la llegada de Paulino al Málaga CF

Paulino aceptó venir a Málaga y descartó ofertas económicas de mayor calado. Manolo Gaspar era consciente de este ‘gesto’ y también permitió la llegada de Ismael Gutiérrez como efecto secundario de la operación a ‘coste cero’. Los agentes del jugador insistieron en incluir esta cláusula de rescisión ante el ‘guiño’ de Paulino al Málaga y que podía ser revisada al término de la temporada. Los blanquiazules le ofrecieron dos años de contrato, una ficha salarial más baja, pero la oportunidad de eclosionar en el verde y aumentar su escaparate para una futura venta. Véase un Tete Morente 2.0.

El extremo empezó a buen nivel. Explotó de la mano de José Alberto y su rendimiento no pasó desapercibido. De hecho, se rumoreó en agendas de equipos de Primera División como Betis o Espanyol. Con el paso de las jornadas, lesión mediante y también con ruido extradeportivo, Paulino desapareció del verde. Ni rastro del regateador ni del jugador que acabó decepcionando a buena parte de la afición. Ni la llegada de Natxo ni posteriormente de Pablo Guede sirvió para recuperar a un jugador que supo de primera mano su nuevo estatus de descarte de boca del argentino. De eclosión a erosión en menos de un año. 50.000 irrisorios euros, 5 goles y 1 asistencia es el bagaje para Paulino de la Fuente en sus 37 partidos oficiales con el equipo boquerón y que tendrá Pachuca como destino tras su salida del Málaga CF.

Manolo Gaspar y Paulino, en la presentación del jugador asturiano // MCF