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La victoria del Málaga en el Nuevo Castalia le dio los tres primeros puntos a los de Pellicer, pero ha traído consecuencias negativas. Las lesiones de Ismael Casas y de Hicham, musculares ambas, no tienen buena pinta. Ambos, de hecho, no pudieron acabar el encuentro ante el Castellón.
El capitán blanquiazul se marchó sustituído precisamente por Hicham después de notar molestias en el adductor de su pierna izquierda. Quedaban pocos minutos y Pellicer pensaba cambiar a Ramón. Sobre la marcha tuvo que cambiar sus planes y retrasar a Calero al lateral y meter a Hicham en banda.
Y el marroquí le falló. Apenas llevaba medio minuto en el campo cuando recibió un balón en profundidad de Cristian. Vaya pase, por cierto. El extremo, partiendo desde la izquierda, ya inició a menor ritmo del habitual la carrera. Y durante la misma su técnica de carrera se resentía… hasta que se frenó y se llevó la mano al cuádriceps.
Pellicer se enfadó y con razón, como quejándose de que no hubiera hecho un buen calentamiento o no hubiera avisado de que seguía con molestias. A saber. Lo único cierto es que el jugador ya no pudo continuar, ni siquiera para estorbar, y se tuvo que retirar. Pasará pruebas ya en Málaga para determinar el alcance de un problema que no parece leve.
Esas lesiones de Ismael Casas y de Hicham restan un poco de alegría a la victoria que se sacó de Castellón.