«Menos mal que no había móviles con cámara en la cena de celebración de la Intertoto»

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Foto: MCF

Este sábado 27 de agosto se cumple el vigésimo aniversario de la consecución de la Copa Intertoto por parte del Málaga CF. Para celebrar tal fecha, los autores de los goles de la final ante el Villarreal pasaron por Radio MARCA Málaga para recordar el evento Mikel Roteta y Gerardo. Un equipo de ensueño, una época dorada y un hito en la historia del fútbol andaluz que sigue siendo recordado como el paso previo a otros éxitos que llegaron después. Una entrevista que no te puedes perder.

No éramos un equipo, éramos una familia. Un grupo muy unido que después lo trasladaba al terreno de juego. Hoy en día sigue pasando, vas paseando por Málaga y la gente te recuerda. Dejamos una buena semilla y estamos orgullosos de pertenecer a la historia del club”, recordaba Gerardo con cariño. “Fue un año distinto. Empezar la pretemporada muy pronto y así poder conseguir un objetivo bonito. En nuestro caso pudimos hacer unas eliminatorias impecables y lo pudimos rematar en esa final contra un gran Villarreal que nos lo puso complicado”, explicaba Roteta.

Ambos recordaron sus goles entre risas. Empezó Roteta. “Yo me acuerdo bien del mío. (risas). Fue un lanzamiento de Miguel Ángel que tuve la oportunidad de desviar y meterla dentro para que Reina no la pudiese parar. Fue un poco oportunista pero valió su peso en oro”, decía el defensa vasco. Gerardo también recordaba perfectamente su tanto. “Sí, me acuerdo. Además fue a mi anterior equipo, y decidí cambiar a su palo en el último momento. Y me salió un tiro bastante bueno, y recuerdo que se lo dediqué a Miguel Ángel que el día de antes le di un pelotazo en El Madrigal, y él también iba a jugar de titular, y tuvo que ir al hospital porque lo dejé KO. Tras el gol lo fui a celebrar con él, pidiéndole disculpas del día anterior”, afirmó.

Joaquín Peiró estuvo presente durante la conversación. Él y sus sabias charlas fueron claves. “No recuerdo mucho lo que nos dijo aquel día. Sí recuerdo la tranquilidad y seguridad que nos transmitía. La gente con más experiencia también nos lo hacían notar. Esa era la clave. En esas eliminatorias y en la UEFA nos tranquilizaban. Éramos una familia y el público también nos llevaba por el buen camino. Esa fue la clave. La tranquilidad del entrenador, aunque era muy competitivo”, contaba con añoranza Gerardo.

Mikel Roteta se siente todavía muy querido al igual que Gerardo. Su Málaga compite en amor y cariño con el de la Champions. “En las redes sociales lo demuestran. Todos los comentarios y anécdotas son inolvidables. Esos ascensos, la Intertoto y los partidos de la UEFA calaron en la gente. Y nos veían como un grupo y una familia más accesible a lo que es hoy el fútbol, más hermético. En cuanto al Villarreal en aquella época era un equipazo, pero que se nos daba tremendamente bien.

De la fiesta de después también se dio algún detalle. “Yo doy gracias a que en ese entonces no había tantos móviles por las calles sino hubiesen hecho un buen reportaje de la cena. Como siempre que conseguimos los ascensos, tanto para el trabajo como para el disfrute era un equipo campeón”, explicaba Roteta. “Yo ni siquiera recuerdo. Éramos los números 1 en todo. Entrenar, competir y celebrar. Ahí se demuestra el equipo. Muchos días comimos en La Rosaleda y estábamos todos juntos. Eso generaba buen ambiente y repercutió en los resultados”, sentenció entre risas Gerardo junto a Roteta.

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