Objetivo: no ser los peores

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La temporada del Málaga ha sido infinitamente más tranquila que el curso pasado. Los blanquiazules certificaron su permanencia hace un par de semanas pero lo cierto es que esta fue virtual desde la victoria por 2-0 ante el Albacete el pasado 11 de abril. Quedaban entonces ocho jornadas por delante. Semanas en las que el equipo de Martiricos no ha sido capaz de sumar una victoria haciendo dos puntos de veintiuno posibles. Una crisis de resultados nunca vista antes esta campaña y que ha emborronado la despedida de Pellicer y muchos de sus jugadores. 

El Málaga peleará contra el Castellón porque este curso 2020-2021, no sea el peor en cifras de la historia del club en la categoría de plata. Un castigo que sería muy duro para una temporada que ha dado muchas más alegrías que penas a los blanquiazules. Pellicer compite contra el propio Pellicer. En la campaña anterior, el Málaga finalizó en decimocuarto puesto con 53 puntos. Es a día de hoy, la peor versión del club de Martiricos en Segunda. Una temporada en la que el Málaga tuvo que sobrevivir con problemas económicos, con sanción de LaLiga y con el club intervenido judicialmente tras ser descubiertos algunos de los ‘chanchullos’ que Al-Thani tenía con las cuentas de la entidad boquerona. 

Otro curso duro fue el 2006-2007. El Málaga CF acababa de volver a Segunda después de siete años consecutivos en Primera. El desembarco fue durísimo. Fernando Sanz cambió el césped por el palco y el club, en pleno proceso concursal, tuvo que apartar a futbolistas al ser incapaz de hacerse cargo de sus salarios. El Málaga llegó a pisar los puestos de descenso a Segunda B en el mes de abril. Marcos Alonso comenzó en el banquillo pero acabó siendo sustituido por un Juan Ramón López Muñiz que certificó la permanencia matemática a falta de una jornada para acabar sumando 55 puntos y un decimoquinto puesto.

Las otras tres temporadas de los malagueños en Segunda han sido siempre exitosas. En la 98-99, el cuadro malacitano salió campeón cuatro jornadas antes de la mano de Joaquín Peiró. En la 2007-2008, fue Muñiz quien consiguió el ascenso tras estar las 42 jornadas del campeonato entre los tres primeros clasificados de la tabla. Mientras que en la 2018-2019 el Málaga finalizó tercero aunque no pudo ascender en los playoffs. Pellicer no quiere ensuciar su CV malaguista y para ello tendrá que ganar al Castellón el domingo. 

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