Situación insostenible para el Málaga CF

Este enfermo necesita un remedio inmediato pero lo malo es que los médicos que deben tratarlo demuestran no estar capacitados. La derrota sufrida en el Reino de León conlleva el final de la trayectoria de Pellicer en el banquillo, y el técnico no se merece este final por más que los resultados son los que mandan. Un servidor le recomendó que no continuara en el Málaga, pero el castellonense confiaba en los fichajes que le tenían que traer, y que, imperdonablemente, no le trajeron.

De nada sirve que obrara el milagro del ascenso a Segunda división o la permanencia milagrosa del año pasado, porque en el fútbol no hay memoria y el presente es el que impera. Pellicer es malaguista como el que más, es indudable, pero no se le veía capacitado para revertir esta situación desde hace varias semanas. Pellicer, al término del partido, ya hablaba de “dar un paso a un lado” y dejó las señales inequívocas de ser consciente de su marcha del banquillo malaguista.

El principal problema de este equipo es que los que deben tomar las decisiones para corregir la caída, no son fiables. El director deportivo, Loren Juarros, es el principal responsable de la confección de una plantilla falta de calidad, descompensada y donde sus fichajes no están dando el resultado apetecido y este material poco fructífero, es el que recogerá el sucesor de Pellicer. Se repite la historia como ya ocurrió en 1ª Federación y la temporada pasada, y son otra vez los canteranos los que tienen que tirar del carro, y no siempre van a poder los jóvenes salvar las castañas del fuego y tapar las carencias de los que debieran asumir la responsabilidad. ¿Se le puede pedir más a Rafita?, ¿va a ser siempre Rafa Rodríguez el salvador del equipo?, ¿hasta cuándo hay que esperar para que los mal llamados refuerzos empiecen a dar un rendimiento aceptable?

Pero a cada uno su responsabilidad, y el máximo responsable de este desastre tiene nombre y apellido: José María Muñoz, el administrador judicial que debiera haberse dedicado exclusivamente a ajustar las cuentas de la entidad y no meterse en las parcelas que no le corresponden. El Sr. Muñoz ya cuenta con un descenso sobre sus espaldas del Málaga por meterse en las parcelas donde no le llamaban, por no haber contado con un director general que supiera lo que es el fútbol profesional al que se le dejara trabajar y tomar las decisiones, permitir que el club siguiera mal dirigido con los Manolo Gaspar y compañía, o entrenadores nefastos y jugadores en declive que condujeron al equipo a la 1ª Federación. ¿Hasta cuándo va a haber que aguantarle?, ¿por qué la jueza responsable de la administración judicial no toma cartas en el asunto y le releva del cargo por alguien que se dedique a hacer su labor administrativa y nada más?, ¿dónde están los señores de Bluebay que tanto se vanagloriaban de decir que iban a hacerse con la administración del club y llevan meses desaparecidos?

Es triste que el único sacrificado sea Pellicer, porque detrás de su más que presumible salida tendrían que ir de la mano Muñoz y Loren y con ellos una serie de futbolistas que no sirven ni para estar escondidos, pero a los que no queda más remedio que aguantarlos hasta el final de la temporada.

No sé quién debe ser el entrenador indicado para este equipo, a la mayoría nos ilusiona por su pasado malaguista Javi Calleja, pero se debe buscar a alguien que sepa sacar provecho a estos jugadores, demostrar autoridad para recuperar la ambición, la ilusión y luchar por salir de una situación que el Málaga CF y los malaguistas no se merecen.

Hagan su trabajo para salvar a este enfermo y al final de temporada cojan la maleta y váyanse para dejar a otros que vengan con aire fresco.

José Manuel Velasco

Redactor Onda Cero Málaga