Un hecho insólito en el momento menos oportuno

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José María Muñoz y Kike Pérez en la sala de prensa en La Rosaleda | MCF
José María Muñoz y Kike Pérez en la sala de prensa en La Rosaleda | MCF

Fracaso deportivo e institucional. El Málaga pierde la categoría, abandona el fútbol profesional y empezará la nueva senda, tras su descenso, en la Primera RFEF. Un hecho insólito. Nunca bajó a tal categoría en su historia reciente. Ahora, 25 años después de abandonar ese pozo, le llega esta cruda realidad. Justo en el momento menos oportuno. Se vendió la idea del ascenso y se consumó una tragedia. Diversos factores, pero los principales, una nefasta planificación deportiva unida a la falta de humildad y autocrítica.

Cuando la economía, gracias a CVC y el apoyo de las instituciones públicas, convirtieron a la entidad de Martiricos en el cuarto límite salarial de LaLiga. Más de 11 millones de euros de Coste de Plantilla Deportiva. Ya le tocó en la 91/92 bajar al extinto CD Málaga a Segunda División B. La historia es conocida por todos y su defunción también con una fecha fatídica que nadie olvida: el 27 de julio de 1992. En caso de haber continuado, aquel equipo hubiese empezado en el mismo escenario que lo hará ahora el Málaga CF.

Tercer descenso del Málaga CF

En los últimos años, la entidad suma dos descensos de Primera a Segunda. El primero de ellos, el más duro. El club estuvo a un paso de la segunda desaparición en la 2005/2006. Fernando Sanz llegó a la presidencia con una plantilla de coste bajo y con un proceso de concursal que evitó la disolución de la misma. Más fácil de recordar, el último batacazo. La 2017/2018 con Míchel y José González a los mandos. Un Málaga que pagaba con creces los excesos de los Al-Thani y que andaba en pleno estado de descomposición. Descenso en abril.

Ahora, tras dos años jugando con fuego, le llega el tercer descenso al actual Málaga CF. El más duro de todos. El primero a la categoría de bronce. Lejos del fútbol profesional. Justo cuando Málaga despega y está a la vanguardia de todos, cuando la institución dejó atrás sanciones y espera más dinero, caso Ontiveros y Horta, vive el descenso a Primera RFEF en primera persona. Le toca ser el millonario en la catacumba.

1 COMENTARIO

  1. Pues nada, hay que aceptar está situación con resignacion.Será una manera dolorosa pero necesaria para hacer limpia a todos los niveles,sanear las cuentas y así poder volver más fuertes. Con gente nueva,profesional y con la mente limpia para conseguir el ascenso lo antes posible.

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