La Guedeneta sigue con paso firme su camino hacia la salvación. Tras dos partidos al mando del argentino, el Málaga CF ha conseguido despertar la raza y el coraje necesarios para poder competir de tú a tú a cualquier equipo. Varios de los jugadores a los que se creía perdidos se suman a la causa, pero otros no consiguen subirse al carro. Fruto de la casualidad, concretamente está siendo un mal año para llamarse Ismael.
Hay que hablar de la escasa participación del canterano blanquiazul. El pasado curso fue un hombre clave para Pellicer, pero esta temporada no encuentra su sitio. 563 minutos después, el de Linares sigue sin convencer. Si José Alberto aún siguiese al frente, se podría hablar de que Ismael Casas simplemente no le convence. No obstante, ya son 3 los entrenadores que no hallan en su figura un jugador al que otorgarle su confianza. Tan solo ha participado en 7 encuentros en todo el curso, y desde el encuentro en Amorebieta el defensor no ha visto ni un solo minuto, lo que hace que no pise el campo desde hace más de un mes y medio.
Un caso mucho más extremo es el de su tocayo sevillano. Ismael Gutiérrez llegó con la vitola de ser ese cuarto hombre que aportara frescura y despliegue físico desde el banquillo, ganando minutos poco a poco. Sin embargo, mirando sus estadísticas, su participación ha sido ínfima. Tan solo acumula 87 minutos en toda la temporada, y no parece que su situación vaya a cambiar. Con 5 encuentros perdidos por una sanción al comienzo de la temporada y una lesión que le impidió demostrar en Ipurúa que podía entrar en la rotación, el jugador propiedad del Atlético de Madrid es un extraño para la afición.
La mejoría en las zonas de la defensa y del centro del campo desde la llegada de Guede complican aún más sus respectivas inclusiones en los onces. El entrenador bonaerense tiene a sus jugadores clave, e incluso apuesta por Escassi como central antes que por el canterano malaguista. Así, los dos atraviesan un mal año para llamarse Ismael, con unas oportunidades que escasean para ambos de una forma muy acentuada.
