El Málaga se juega mucho mañana y aunque José Alberto López diga lo contrario en sala de prensa, los hechos son distintos. El Málaga CF se concentrará por primera vez desde que empezó la temporada oficial. Los blanquiazules dormirán juntos esta noche como muestra de unión ante la visita de un Leganés que llega animado a Martiricos, una noticia que adelanta Radio MARCA Málaga. Desde la pretemporada y en verano, no lo había hecho. Pruebas de que hay una final a al vista para el Málaga CF.
El conjunto blanquiazul vuelve a la competición liguera después del descalabro de Copa y se juega mucho ante el equipo pepinero. La afición espera una reacción de los blanquiazules en una cita clave para el futuro del técnico, no por que su cargo corra peligro, pero sí por la situación que se ha generado en las últimas semanas. José Alberto vivirá casi un ‘juicio popular’ ya que quedó tocado del KO copero. No solo él sino también jugadores importantes del proyecto blanquiazul que siguen lejos de su mejor versión. Por tanto, esta jornada el Málaga CF tiene una final a la vista. Se quiera admitir en La Rosaleda o no.
El entrenador despejaba balones hoy ante los medios. “El de mañana no es ninguna final para nadie. Son tres puntos importantísimos y volvemos a casa, donde tenemos números espectaculares y queremos acabar bien el año con 30 puntos y marcharnos de vacaciones muy contentos sabiendo que hay cosas que tenemos que mejorar y dar un paso adelante. Muchos de los que estamos aquí los hubiésemos firmado antes de jugarlo, son números excelentes para un equipo nuevo con circunstancias adversas en cuanto a lesiones se refiere”, explicó.
Y es que el propio club de Martiricos, en caso de vencer, seguiría cerca de los puestos de play off. No obstante, una derrota alejaría la zona privilegiada hasta los siete puntos de distancia. No lo tendrán nada fácil ante un renacido Leganés con Nafti en el banquillo y que tuvo que sufrir bastante para superar la eliminatoria copera. Una final a la vista para el Málaga CF en la que el cansancio de los madrileños puede jugar un papel vital al tener menos días de descanso.
