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El atacante argentino fue uno de los nombres propios de la rueda de prensa previa al choque del Málaga CF ante la SD Huesca. El equipo blanquiazul necesita gol, requiere pólvora y los tantos no llegan. Las dos últimas citas de los malaguistas concluyeron sin perforar portería rival. Tablas en casa ante la Ponferradina y derrota en Fuenlabrada. Cifras que preocupan al entrenador y es por ello que anhela el paso adelante de los jugadores referentes. Entre ellos el de un Pablo Chavarría al que Natxo González le lanza un guante.
Pablo venía de una lesión, de recaídas, quizá por precipitarse. El objetivo era ir haciendo minutos, aunque en Amorebieta jugó de inicio. Pero cada vez está mejor y tiene que tener más protagonismo porque tiene que ser fundamental para nosotros, dijo el míster blanquiazul al respecto.
El entrenador espera que el argentino recupere su mejor versión. Espera reacción de un experimentado jugador y que de momento el físico le sigue lastrando. Una reacción en forma de goles y de mejores sensaciones. Ese es el objetivo global, pero también particular.
Desde hace más de un mes, los focos están puestos en Pablo Chavarría. Recientemente ha ido alternando minutos y titularidades o suplencias. En Lezama ante el Amorebieta Pablo Chavarría jugó más de 60 minutos y Natxo González lo alineó desde el inicio. El míster también lo ha empleado como herramienta de refresco en las dos últimas jornadas. Es cierto que su presencia en el terreno de juego ha sido bastante testimonial y pese a jugar 13 minutos en casa ante la Ponferradina o 22′ en Fuenlabrada no termina de ver puerta.
Pablo Chavarría en un entrenamiento en el Anexo | Javier Díaz