La Línea de Concepción acogió este fin de semana los Campeonatos de España de Beach Sprint. 250 deportistas, 183 tripulaciones y 22 clubes del país se batieron en duelo desde la orilla de la Playa de Poniente en un torneo que adquiere especial interés desde que el COI confirmó que esta modalidad será olímpica en los Juegos de Los Ángeles 2028. Desde entonces, el reto de Adrián Miramón, absoluto dominador de la disciplina en los últimos años, es acabar en lo más alto del podio angelino. Esa es la meta y la estrategia a seguir en los próximos años. Y para ello es consciente de que no se podrá ganar todo lo que se compita. Fue justamente lo que ocurrió en el campeonato de La Línea, al que Adrián Miramón llegaba con ilusiones y expectativas, pero también con la merma que lleva arrastrando esta temporada por una lesión que le inoportunó en los inicios del curso. Miramón marcó el segundo tiempo en los time trials del viernes, con lo que se aseguraba un cruce, a priori, más asequible. Ya el sábado se adjudicó la eliminatoria de octavos ante Adrián Navarro con un tiempo 2:31. Fue el domingo cuando se resolvieron las rondas decisivas. En cuartos, el remero del Club Raspas del Embarcadero, se deshizo de Joaquín Rodas del CN Sevilla, marcando un interesante 2:18 en meta.
En semifinales le esperaba el reciente campeón de larga distancia, el finlandés Joel Naukkarinen. Fue una final anticipada. De poder a poder. Miramón salió a por todas desde el primer sprint a pie y lideró la primera parte de la prueba hasta la ciaboga, donde Naukkarinen recortó distancias para decidir la manga en un tramo final emocionantísimo en el que Adrián repitió el tiempo de cuartos (2:18). Después, sin ningún margen para recuperarse del esfuerzo, cayó en la final de consolación ante Ander Martín, del RCN Torrevieja, y se quedó fuera del podio. El Final A, Miguel Salas, del RCR Alicante, venció con solvencia a Naukkarinen, quien al igual que Miramón también llegó extasiado a la prueba definitiva. “Las sensaciones son bastante negativas, pero hay que analizar las cosas con perspectiva. He sido yo quien ha perdido porque no he competido bien. Salí de la remada y de la técnica que suelo llevar. La falta de competiciones de este año también ha jugado en mi contra, pero por otro lado hay que ser realistas y saber de dónde vengo, de la lesión que he tenido.
Ya sólo el haber participado aquí es un éxito”, señaló Miramón, que enfatizó el nivel del Beach Sprint en España: “Somos especialistas en esta modalidad a nivel mundial y no se puede comparar, sin menospreciar a otro país, a ningún otro campeonato nacional. Si cometes un par de fallos, aquí hay otros deportistas que estarán para ganarte”. El relevo en el cetro nacional se lo da Miguel Salas, compañero de fatigas de Miramón: “Toca felicitarlo. Ayer tenía sentimientos encontrados porque yo perdí, pero ganó Miguel que es como mi hermano pequeño, al que he enseñado mucho y con quien me queda mucho por aprender y por vivir. Somos compañeros de habitación y entrenamos juntos, es la persona con la que más entreno, así que estoy triste por mí, pero muy orgulloso por él”. Tras esta prueba, Adrián Miramón se pone el chip del Europeo y del Mundial, campeonatos de los que actualmente es campeón y subcampeón, respectivamente. Ambos tendrán lugar en Turquía, el primero del 8 al 12 de octubre y el segundo del 6 al 9 de noviembre. Para ello, el remero malagueño se concentra desde hoy mismo en el CAR de Murcia, donde estará dos meses. En ese sentido, esta misma semana tendrán lugar las pruebas en las que se definirán los botes del equipo nacional para ambos campeonatos.