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El conjunto norteafricano, que se ha reforzado con ocho caras nuevas con respecto al encuentro de ida, luchó hasta el final para intentar sorprender a los malagueños, tal y como advirtió su entrenador, Faisal Salmi, antes del inicio del choque y tras reconocer que se enfrentaban “al mejor equipo del grupo F de Primera Nacional”, dijo. Sin embargo, los chicos de José Luis Hidalgo y Juanjo Fernández, muy concentrados, demostraron ser muy superiores a los locales, y aunque gran parte de la primera mitad fue muy igualada, pues el Gimnástico es un conjunto muy competitivo, que despliega un gran ritmo de juego, con muchos contrataques y con intensidad en su primera línea, los costasoleños se marcharon a la caseta con una renta de un gol (13-14).
La segunda parte, en cambio, fue clara para los intereses del BM Ciudad de Málaga merced al sobresaliente encuentro jugado en equipo, con una gran defensa que supo interceptar las acciones melillenses, una buena dirección de juego de Nacho Quero y Alberto Fernández, una brillante actuación en ataque de Cabello, Cazorla y Juanto, y un espectacular Fran Alarcón bajo los palos, que lo paró todo y fue, sin duda, el jugador clave del partido e incluso anotó un tanto desde su potería.
En definitiva, gran partido en una cancha complicada y ante un equipo muy correoso que no da un balón por vencido. Este resultado permite a los malagueños mantenerse en los puestos altos de la tabla clasificatoria, tercero, con 21 puntos, a cuatro del primero, el Cajasur, y a uno del segundo, el Maracena, aunque con dos partidos menos que los cordobeses y granadinos y con el ‘gol average’ para los malagueños.
Celebración de la victoria en Melilla