
Plaga de bajas de la temporada del Málaga CF: La mitad de la plantilla, afectada
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Si algo ha mermado al Málaga CF desde el inicio de la pretemporada el pasado 7 de julio, ha sido una plaga de lesiones cuya lista ya habla de la mitad de la plantilla afectada. Hasta 14 son las lesiones o problemas distintos que han sufrido los jugadores malaguistas en los cuatro meses que van desde que inició esta nueva campaña 2025/2026.
En concreto, 13 son los futbolistas que han sido baja por problemas físicos. En una plantilla de 27 jugadores, contando a Álex Pastor (lesionado en agosto), más los habituales con ficha de filial (Rafa Rodríguez, Aaron Ochoa y Rafita), y sin contabilizar a los lesionados de larga duración desde la campaña anterior y que aún no han entrenado ni disfrutado de minutos con el grupo (Ramón y Moussa). Unos números que preocupan, sobre todo en el apartado de las lesiones musculares, donde cinco de seis problemas han sido de aductor.
En orden cronológico, el primero en visitar la enfermería fue uno de los nuevos fichajes: Eneko Jauregi. Cuatro días después de disputar el primer amistoso ante el Antequera, el club de Martiricos confirmaba que el delantero sufría una lesión miotendionsa en el aductor largo de su pierna derecha. El ex del Racing de Ferrol no regresó hasta el 6 de septiembre ante el Granada, donde disputó los últimos cinco minutos de partido.
En la previa del siguiente partido amistoso de pretemporada ante la UD Almería, Luismi Sánchez se caía del once tras abandonar el calentamiento con molestias. Días después, se confirmaba que el gaditano sufría una sobrecarga en el aductor de su pierna izquierda. Se perdería posteriormente los siguientes tres partidos de preparación, hasta regresar como titular en el Trofeo Costa del Sol ante el Real Betis Balompié. Sin embargo, en la semana siguiente, un fatídico choque en su rostro le hizo retirarse en los primeros 20 minutos del primer partido de liga ante la SD Eibar. Tuvo que pasar por quirófano en una intervención complicada. No se le espera mínimo hasta el mes de enero.
Quien llegó justo para la primera jornada de la temporada fue Alfonso Herrero. En la concentración de Estepona, justo antes de viajar a Oxford, el portero sufrió un fuerte golpe en la frente en un entrenamiento que le produjo una aparatosa brecha. Esto le impidió disputar los siguientes tres amistosos.
La lesión más grave llegó el 27 de agosto. Álex Pastor se retiró lesionado del entrenamiento en muletas tras torcerse la rodilla. Días después se confirmaron los peores presagios. Lesión completa de ligamento cruzado anterior, menisco interno y afección leve del ligamento colateral medial. El central, que había empezado muy en forma, se perdería toda la temporada y su ficha finalmente fue ocupada por Darko Brasanac.
El siguiente en caer fue Carlos Puga con una lesión miotendinosa en su aductor izquierdo el pasado 9 de septiembre. Desde entonces, estos problemas no le han permitido volver a competir. Justo cuando su reaparición estaba cerca ante el Andorra, recayó. Pero, como noticia positiva de la semana, el lateral diestro ya está entrenando de nuevo con sus compañeros a buen ritmo.
Un día más tarde de la lesión de Puga, Izan Merino sufrió una torcedura de tobillo que le tuvo apartado del equipo hasta su convocatoria con España para el Mundial Sub-20 en Chile. Allí, el malagueño se perdió el debut, pero posteriormente completó todos los minutos del torneo hasta la eliminación de ‘La Rojita’ en cuartos de final. Aterrizó en Málaga e inmediatamente tuvo minutos en Leganés, pero posteriormente tuvo que parar unos días previos al partido ante el Andorra.
Una lesión similar sufrió Adrián Niño, pero con muchas más complicaciones. El roteño se torció en los entrenamientos previos a jugar ante el Cádiz CF. Sin embargo, el delantero forzó para salir como titular y tuvo que ser sustituido a la media hora. Desde entonces, desapareció de los entrenamientos hasta esta semana, en la que ha vuelto con sus compañeros con normalidad. Aproximadamente un mes y medio sin competir, con una recaída de por medio en el proceso.
Un día antes de confirmarse la lesión de Niño, el Málaga ofrecía el parte médico de Joaquín Muñoz, quien sufrió una lesión en el aductor de su pierna derecha. Casi un mes apartado de las sesiones de entrenamiento, regresó ante el Deportivo de La Coruña el 12 de octubre. En ese mismo partido, Jokin Gabilondo se tuvo que retirar a los 20 minutos de entrar en el campo con una fractura espiroidea diafrisaria en el cuarto metacarpiano de su mano derecha. Sin embargo, el de Urretxu solo se perdió un partido ante el Leganés y regresó con un vendaje al trabajo y dinámica grupal.
En Butarque el que se retiró sustituido con problemas en su aductor fue Juanpe. Afortunadamente, el jerezano solo se perdió varios entrenamientos y pudo estar disponible para la segunda parte en el choque ante el FC Andorra.
Por el camino, tanto Dani Sánchez como Josué Dorrio causaron baja por distintos procesos víricos. El segundo, por partida doble. El último en visitar la enfermería ha sido Chupete, que se retiró con hielo en su pierna izquierda del partido ante el CD Estepona en Copa del Rey. Tras no poder ser convocado ante el CD Castellón, el Málaga confirmaba este martes que el ‘9’ sufre una lesión muscular en los isquiotibiales y estará apartado varias semanas.
Un largo historial que ha lastrado al Málaga CF en lo que va de curso
En resumen, son hasta 14 los problemas que ha tenido la plantilla del Málaga en tan solo cuatro meses de temporada. Seis lesiones musculares, de las cuales, cinco, son de aductor. Dos torceduras de tobillo, dos graves contusiones, una lesión de rodilla, una fractura en la mano y procesos víricos. Lesiones que han sufrido hasta 13 jugadores distintos en la plantilla. Lo que supone la mitad del equipo. Ya que, son otros 13, contando a los habituales con ficha de filial, los que no han tenido problemas hasta el momento. Por tanto, esta es la plaga de bajas que ha sufrido el Málaga CF hasta ahora, con la mitad de la plantilla afectada.
Foto: José Manuel Campos
