Compartir esta publicación
@JuanjeFernandez || Se acerca el fin de semana y en el Málaga el nombre del Cádiz empieza a sonar con más fuerza cada vez. Los blanquiazules saben de la importancia de poner en valor los puntos que se consiguieron en la anterior jornada ante el Numancia en casa. Desde la llegada de Pellicer, el Málaga solo ha perdido un partido pero no ha conseguido las dos victorias consecutivas, algo que sí logró Víctor Sánchez del Amo y que podría ser clave con el encuentro ante el Racing de Santander en el horizonte. La empresa no es fácil, conseguir la tan ansiada racha de victorias que haga de trampolín pasa por la casa del líder.
Los amarillos solo han perdido un choque en casa, fue ante el Numancia precisamente. Lo que los malacitanos hicieron ante el conjunto de Carrión podría ser una buena referencia para tumbar al submarino amarillo. La clasificación no deja lugar a tomarse respiros, es por eso que en el vestuario malaguista ven esta ocasión como un momento perfecto del curso para intentar hacer una racha positiva.
El Málaga sabe ya lo que es estar nueve encuentros sin perder. La racha, que tuvo más empates que otra cosa, no sirvió para despegar a los costasoleños de la zona de descenso. Lo que los blanquiazules necesitan es sumar de tres y ese es el objetivo con el que viajarán a Cádiz. El duelo es domingo pero la mente de la grada y del equipo coquetea con el partido ante los santanderinos y la posibilidad de dar un acelerón en la lucha por la permanencia. Los de Martiricos se encuentran al final del pelotón de equipos que luchan por huir de la quema por lo que hacer un 9 de 9, algo inédito este curso, sería crucial.
Antoñín celebra un gol en el duelo de ida // Marilú Báez