
SIN RASTRO DEL PLAN DE VIABILIDAD
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@JuanjeFernandez || Richard Shaheen fue anunciado como director general en el día de ayer, pero lo cierto es que el estadounidense lleva ejerciendo en Málaga más de dos semanas su nuevo cargo. Poner al club al día es la misión de la enésima mano derecha del presidente desde que aterrizó en la Costa del Sol. El plan de viabilidad es el principal cometido del nuevo directivo malaguista, cuyas declaraciones al respecto han sido cero desde su llegada. Shaheen se ha metido en las raíces del club y se le ha podido ver charlando con jugadores y cuerpo técnico con asiduidad.
En el seno del club malaguista sigue instalada la preocupación pese al último nombramiento. Javier Tebas ya dejó claro que el club de Martiricos tendría que pasar un examen en estas fechas, pero lo cierto es que salvo los despidos de Caminero y Jofre, no se han tomado decisiones de gran calado. Algunas de las medidas ya fueron propuestas por el propio Jofre a LaLiga, tales como la salida de jugadores o la reducción de la estructura del club, con más de 200 empleados en la actualidad.
Hasta ahora solo se conocen dos detalles de las maniobras que Shaheen ha querido llevar a cabo. La reducción drástica del presupuesto para la cantera, incluida la venta de los jugadores que están despuntando en ella y el intento de apropiarse para el plan de viabilidad de los más de cuatro millones de euros cedidos por el Ayuntamiento para la construcción de la Ciudad Deportiva en Arraijanal. Ser la mano derecha de Al-Thani no es de por sí un plato fácil de digerir, el presidente entorpece todas las labores de los trabajadores del club a excepción de las propuestas de sus hijos, de los cuales ya no queda ninguno en la ciudad.
Shaheen es el único hombre de confianza de Al-Thani // Marilú Báez
