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@JuanjeFernandez || Pocas cosas positivas se pueden sacar del partido del Málaga en Elche. Muchos jugadores fueron ‘señalados’ como culpables de la derrota de los blanquiazules en tierras alicantinas, tercera oficial entre Liga y Copa en lo que va de curso. Uno de los jugadores que estuvo en el punto de mira fue Jack Harper. El canterano de Fuengirola fue sustituido en el descanso después de que sus primeros 45 minutos fueran muy flojos. Mal en los controles y corriendo muchas veces sin sentido, a Muñiz no le quedó más remedio que cambiarle por Héctor Hernández, que tampoco estuvo mucho mejor, al salir de los vestuarios.
No es la primera vez que Muñiz hace esto en el descanso de un partido. Se trata de la tercera vez que el asturiano modifica los planes. En la primera jornada fue Ontiveros el que abandonó el terreno de juego en Lugo. El marbellí había fallado en la primera jugada del encuentro y Muñiz le castigó con el banquillo y la suplencia en el siguiente choque ante el Alcorcón. El extremo salió fortalecido de la situación y acabó encontrando su hueco en el once.
En Riazor volvió a pasar. Juanpi estuvo fuera de sitio toda la primera parte y el mensaje de Muñiz fue mandarlo al banco. El venezolano fue sustituido por Pacheco aunque a la siguiente jornada ante el Albacete volvió a ser titular. Esto demuestra que a Muñiz no le tiembla el pulso a la hora de cambiar algo cuando no le gusta. Todo un aviso para navegantes y para el propio Harper.