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El Unicaja experimenta su segunda derrota de la temporada en tierra madrileñas. Los cajistas no han podido parar a un Real Madrid que quería dejar de perder esta semana. Mucha defensa y más aún de acierto por parte de los blancos para dejar a los de Ibon Navarro sin opciones. Ni un momento han bajado los brazos los de Málaga, que veían frustrado a los segundos cada intento de acercamiento en el marcador que se cerró 90-77. Deck y Llull lideraron la ofensiva de Chus Mateo, mientras que Kravish, Osetkowski y Carter lo hicieron para el conjunto verde. De esta forma, el Unicaja no terminó de alcanzar el caramelo en el Wizink.
El partidazo arrancó con un Real Madrid muy agresivo. Defensa fuerte y un ataque con gran determinación que consiguió en menos de dos minutos un parcial de 8-0, gracias a una sucesión de dos triples de Abalde y Deck. Alberto Díaz seguía igual de intenso que siempre en una defensa que se intuía que iba a ser más que necesaria. Melvin Ejim remaba a favor de los cajistas, junto a Kendrick Perry. Sin embargo, el acierto estaba del lado local. Por suerte, el mal comienzo del quinteto titular de Ibon fue mejorado por el banquillo. A falta de tres minutos para el final de cuarto y con un marcador que doblaba en puntuación, Tyson Carter se puso el mono de trabajo. Un tiro de dos y un triple del de Missisipi, al que ayudó Barreiro dejaron en cinco la distancia (18-13).
Tyson Carter tenía claro su papel y con dos tiros libres, que abrieron el luminoso del segundo periodo, dejaba a solo tres puntos a los cajistas. Fue Tyson Pérez, con una de un par, quien acercó a la mínima al Unicaja (18-17). Acto seguido, embestida madrileña. Triples de Feliz y Llull que cortaban el aire de los verdes. Después de 15 minutos de partidos, el Real Madrid seguía sumando desde el libre. Alcanzando la decena de puntos (30-20) con Musa. Precisamente, la línea de personal era lo que iba a salvar el partido de los malagueños. Un encadenado de tiros libres cajistas recortaron distancias. Osetkowski, Perry y Taylor hicieron su trabajo de maravilla. Los blancos se cargaron de faltas en esta primera mitad fruto de ese intenso nivel defensivo, pero el Unicaja supo aprovechar, 14/14 que le mantenía con vida (39-34).
La reanudación del parón llegó cargada de energía. Cada cual quería más el partido y el aro era testigo. Los blancos parecían tocados con una varita. Gaby Deck y Alberto Abalde castigaban los intentos de los malagueños por recortar distancias. Testigos de un marcador que daba un paso a su favor y dos para los locales, el Unicaja seguía su trabajo. Triplazo de Ejim con noventa segundos en el reloj (57-52), daban la ilusión que Hezonja arrebató con otro desde la línea de 6,75 metros para ir al asalto final.
Abre el final el mismo madridista que lo cerró, con un triple que subía a 11 la distancia. Tyson Carter hacía lo propio segundos después y volvía a recortar diferencias. Sin embargo, el partido seguía la misma dinámica. Enseñar el caramelo para luego quitarlo. Sin dejar de remar, los cajistas no paraban de chocar contra un tsunami blanco. Con todavía 7 minutos por delante, Deck dominaba el Wizink. Ibon lo intentaba con un tiempo muerto tras un mate de `el tortuga´ pero, la cuesta no dejaba de inclinarse. Osetkowski como nombre propio de este periodo de los cajistas. Ni él ni su equipo dejaron de luchar pero, el que tenía un `plan´,hoy, era el Real Madrid. Claro ejemplo de que a veces se gana y a veces se pierde. Merecida victoria de los de Chus Mateo que calman las aguas a costa de arrebatar una victoria al Unicaja (90-77).
Llull frente a Kalinoski en el duelo en el Wizink // Foto: ACB photo. (Víctor Carretero).