Situado en primera línea de playa en Fuengirola, junto al Castillo Sohail, el Hotel IPV Palace & Spa inicia una nueva etapa con una propuesta que combina su esencia clásica con una visión renovada de la hospitalidad. Con 285 habitaciones, una cuidada oferta gastronómica y un spa diseñado para el bienestar, el hotel reafirma su posición como uno de los grandes referentes del litoral andaluz. Su ubicación estratégica —entre Málaga y Marbella, a solo 20 minutos del aeropuerto internacional— lo convierte en el punto de encuentro ideal tanto para visitantes internacionales como para el público local. “Creemos en las personas, en el valor del equipo y en hacer sentir al cliente como en casa. Ese es nuestro motor”, destaca su CEO, Nacho Pérez. Renovación e impulso MICE El hotel está inmerso en un proceso de renovación de sus espacios de reuniones y eventos, reforzando su posicionamiento en el segmento MICE. Dispone de 10 salones multifuncionales con luz natural y capacidad para 600 personas, perfectos para congresos, encuentros profesionales y celebraciones privadas.
Un espacio abierto a la Costa del Sol IPV Palace & Spa apuesta por abrirse aún más al público local, consolidándose como un espacio vivo frente al mar. Su Beach Club es ideal para disfrutar de un cóctel al atardecer; el Spa, con circuito hidrotermal y tratamientos especializados, invita a la desconexión; y sus 5 espacios gastronómicos ofrecen una cocina mediterránea e internacional en un entorno privilegiado. Además, el hotel ha reforzado su equipo con nuevas contrataciones, reafirmando su compromiso con el empleo de calidad en el sector turístico. Una visión clara de futuro Con la campaña de verano Una Ventana al Mediterráneo, el hotel invita a redescubrir la hospitalidad genuina, cercana y conectada con el entorno que define el estilo de vida mediterráneo.
