Pese a que ya no se sufre una situación grave de sequía, el Ayuntamiento de Mijas continúa en su afán para ahorrar agua. Si este año los pulsadores de las duchas y lavapiés de la playa funcionan 15 segundos como medida de control, a ello hay que sumar los espacios públicos modificados de tal manera que no es necesario su riego continuo usando para ello materiales sostenibles. Es la llamada xerojardinería, una técnica ya habitual que ha hecho que el municipio disponga de más de un centenar de espacios de este tipo.
Al respecto, el concejal de Parques y Jardines, Daniel Gómez, ha explicado que la xerojardinería es una técnica de planificación de un espacio con bajo o nulo consumo de recursos hídricos. “El objetivo de un xerojardín es conseguir la máxima sostenibilidad, reduciendo el consumo de agua y manteniendo su función estética, con el fin de preservar el medio ambiente. En el caso de Mijas, además de plantas con pocas necesidades hídricas, usamos elementos como cantos, madera, cortezas de pino o vidrio reciclado para decorar los lugares seleccionados”, ha explicado el edil.
Tal y como ha explicado Gómez, en los últimos meses se ha actuado en distintos puntos del término municipal como es el caso de la glorieta que da acceso a Calahonda. También se ha intervenido en las rotondas de subida a Mijas Pueblo, en la de calle Miguel Hernández, en la entrada a La Cala desde Marbella, en el Lagarejo, en el lateral de Pueblo Don Silverio, en la zona conocida como el Puerto de Mijas, en las fuentes de acceso al Teatro de Las Lagunas y en la Plaza Virgen de la Peña.
“Ahora mismo estamos trabajando en el acceso a la nueva piscina de La Cala y también a la rotonda de acceso a este núcleo urbano. Y después seguiremos con nuevos espacios gracias a la gran labor que llevan a cabo los empleados municipales. Aunque hayamos tenido un año hídrico bueno, no se puede bajar la guardia”, ha concluido el edil.
