@Carloshernando_ | Mientras haya vida, hay esperanza. Eso debe pensar el Unicaja, que agota las últimas opciones en la Euroliga siempre y cuando gane en la tarde noche del viernes a Brose Bamberg. El conjunto alemán ya ganó en el Carpena y ahora puede sentenciar a los de Plaza, un técnico que crucificó a Musli y que tendrá muchas ganas de demostrarle su error al abrirle la puerta de salida.
Vencer en la pista germana será complicado con la fatiga y las bajas en el juego interior, aunque un triunfo aumentaría las pocas posibilidades del cuadro malagueño. El equipo de Los Guindos confía en un triple empate entre ellos, Baskonia y Maccabi en la última jornada de la competición, que le permitiría con mucha seguridad clasificarse al top 8.
El conjunto macabeo cayó contra el Panathinaikos en la jornada 28, un resultado que va como anilllo al dedo si se suma la derrota del conjunto vasco en el Palau, un encuentro que se jugará a las 21 horas en la Ciudad Condal. Si al término de la fase regular de la Euroliga existe una igualdad entre los tres clubes, Unicaja tiene todas las papeletas para obrar el milagro y continuar regalando a la afición verde el mejor baloncesto del continente.