Estamos asistiendo a unos días de convulsión debido a las noticias que nos llegan desde los tribunales o por los informes policiales. No les hablo de la vergüenza que genera el escándalo en el que está inmerso el Partido Socialista a nivel nacional, sino a lo ocurrido últimamente en torno a la familia Al Thani y que, tarde o temprano, tenía que ocurrir. El revuelo fue mayúsculo cuando se conoció la petición de 14 años de cárcel para cada uno de los integrantes del clan que, presuntamente, vino a desfalcar al Málaga CF porque eso es lo que se entiende cuando la fiscalía les acusa de apropiación indebida, administración desleal e imposición de acuerdos abusivos.
Los Al Thani, el jeque y sus tres hijos, me recuerdan a los hermanos Dalton, esos forajidos del lejano oeste a los que perseguía implacablemente Lucky Luke y que divirtieron y divierten a no pocas generaciones en los comics de Morris y Goscinny. Los Dalton eran cuatro, como los Al Thani; con sus capacidades intelectuales más o menos desarrolladas, como los Al Thani; siempre cometiendo fechorías, como ‘presuntamente’ los Al Thani; y siempre terminaban ataviados con el traje a rallas en la cárcel, algo en lo que no coinciden, por el momento, con los Al Thani debido a que están eludiendo a la justicia española.
Han sido demasiados años hasta conocer las conclusiones demoledoras de la fiscalía, sobre unos delitos que todos conocemos pero a los que, por presunción de inocencia, hay que anteponer ‘presuntos’, pero, perdónenme, para mí y para muchos malaguistas, los Al Thani son Presuntamente Presuntos.
Lo malo de todo esto es que, muy a nuestro pesar, a este escabroso asunto aún le quedan varios años para que se termine. A nadie le cabe duda de que los Al Thani van a intentar dilatar la cuestión el máximo tiempo posible como base de su estrategia para lograr eludir la cárcel. Lo peor de todo es que el jeque sigue en su mundo irreal, publicando mensajes enigmáticos en redes sociales que demuestran que todos los humanos estamos equivocados y él es el único en posesión de la verdad.
Tristemente, y como consecuencia de la insensatez del jeque, se está perdiendo una oportunidad de oro para el futuro de la sociedad, para que acabe la maldita administración judicial, para que llegue un grupo inversor con ganas de apostar por el club ya sea el que representa José Manuel Calderón, o el QSI de Al Khelaifi, el Fenway Sport Group vinculado al Liverpool, Red Bird Capital enlazado con Antonio Banderas, el argentino Andrés Fassi o, más recientemente, uno de Arabia Saudí.
A todo esto y si tanto interés tenía por lograr la administración del club, ¿a qué esperan desde Bluebay para dar un paso al frente o es que creen que con pedir órdenes de detenciones europeas contra el clan Al Thani, es suficiente para justificarse? Parece que, por más que se le haya dicho, y me consta que por varias personas, el cabeza visible del grupo hotelero, Jamal Satli Iglesias, no es consciente de la mala imagen que se ha generado en el malaguismo desde hace tiempo. Su falta de claridad hacia la afición en cuanto a sus intenciones y el enrevesado asunto de las ‘camisetas’, le dejan en un mal lugar que irá a peor con el paso de los días por su inacción. Sr. Satli Iglesias, para este viaje no hacían falta tantas alforjas.
Para acabar, espero que se aclare el grado o no de participación de los Moayad Shatat, mano derecha de Al Thani, y los ejecutivos Vicente Casado, Manuel Novo, Joaquín Jofre y Roberto Cano. Me resultaría muy decepcionante que se demostrara la culpabilidad de todos ellos, en concreto de aquellos con los que tuve algún trato a los que creía buenas personas. Permítanme que, mientras no se demuestre lo contrario, emplee con convicción el calificativo ‘presuntos’ y que una vez finalizado el juicio, se demuestre su inocencia, pero, si no es así, que ‘cada palo aguante su vela’.
José Manuel Velasco
Redactor Onda Cero Málaga
La vergüenza la genera ud. asociando la política al futbol.
Ese vuelve se mea en el estadio y se caga y encima le damos.las gracias ole hay
Sr. Velasco, no le ha parecido bien mi comentario. Pues se lo repito NO ASOCIE LA POLITICA CON EL FUTBOL O CUALQUIER OTRO DEPORTE. Ya puede censurar este otro comentario.
Su primer comentario aparece publicado. Antes de dar a entender que lo hemos censurado, le rogaría que mirase bien. No está bien soltar ese tipo de comentarios si no es cierto. Espero que lo entienda y gracias por participar. Ya de paso le aclaro que el señor Velasco es columnista, pero no es moderador de este foro. Le guste o no un comentario no tiene potestad ni para eliminarlo ni aprobarlo. Un cordial saludo!
Como el Jeke vuelva como en la primera etapa o como su primo del P. S. G. seguro que se nos olvidaría estos años de ……………. y abandono.
Los Malagueños en regla general queremos que vengan de fuera a resolvernos los problemas, hemos tenido la oportunidad de comprar acciones y NO LO HEMOS ECHO, y dejamos desaparecer al antiguo Malaga, despues en varias ocasiones lanzaron a la venta acciones y pocos Malagueños compraron, y espero que cuando la Intervención Judicial termine los Malagueños cambien y se puedan hacer con acciones para no depender de nadie externo a Malaga.
Bueno y este año sea como sea vamos para primera si o si.
Al final, lo que tenía que pasar, pasó. Lo de los Al Thani no es una sorpresa, es simplemente la crónica de un desastre anunciado que muchos llevamos años viendo venir. La petición de la fiscalía 14 años de cárcel para cada uno de los miembros del clan solo viene a poner cifras y delitos concretos a lo que los malaguistas intuíamos desde hace tiempo: que vinieron al Málaga CF no para hacerlo crecer, sino para servirse de él como un juguete de lujo, o peor, como un cajero automático.
La comparación con los hermanos Dalton no puede ser más acertada: cuatro personajes , cada uno con su papel en esta «serie», que han ido dejando a su paso ruinas, promesas rotas y un club judicializado y abandonado a su suerte.
El jeque sigue instalado en su universo paralelo, lanzando mensajes crípticos en redes sociales como si todavía tuviera algo que decir. Mientras tanto, el club sigue atrapado en una administración judicial que debía ser temporal y que, por culpa de esta lío legal, amenaza con eternizarse. Todo esto frena el futuro de la entidad e impide que proyectos serios puedan tomar el relevo.
¿Dónde está BlueBay? ¿Qué piensa hacer? Porque no basta con pedir órdenes de detención y sacar comunicados. Si de verdad quieren asumir las riendas del club, hace falta algo más que gestos simbólicos. Hace falta valentía y claridad.
A estas alturas, lo único que uno pide es que se haga justicia, que el club recupere su dignidad y que, de una vez por todas, los que solo han venido a llenarse los bolsillos salgan del mapa. Porque el Málaga CF merece mucho más que ser la víctima de una mala novela de forajidos.
Venga, un saludo !!!