@JuanjeFernandez || Para el partido ante los chicharreros, Muñiz dio la sorpresa recuperando a Diego González para la causa. El defensa gaditano había salido del once titular tras dos partidos de bajo nivel ante Reus y Zaragoza. En el primero de los choques, el zaguero se vio superado en todo momento y debió acabar expulsado tras la falta que el colegio metió dentro del área pero que fue fuera y por lo tanto roja por el ser el último hombre. En La Romareda sufrió con Pombo y Marc Gual. Es por eso que tras su suplencia con el Lugo, Lombán fue el elegido por el entrenador, nadie le esperaba entre los elegidos ante el Tenerife.
El joven defensa aceptó el reto y cuajó uno de sus mejores partidos de la temporada. La meritocracia de Muñiz sigue siendo efectiva y el central mantuvo a raya a Malbasic y Nano. Especialmente a este último cuando saltó en los minutos finales a intentar revolucionar el partido. Cuesta recordar un mal pase o un despeje defectuoso suyo en el partido de ayer. 90 minutos rozando la perfección que le valieron la aprobación de sus compañeros. Munir, Pau y Ricca estuvieron muy atentos a apoyarle moralmente tras cada una de las jugadas complicadas en las que tuvo que intervenir.
Con la recuperación de Luis Hernández en el aire, el madrileño se marchó a su ciudad natal para seguir tratándose de su lesión en los tendones de su abductor de la pierna derecha, el casting en el eje de la zaga está más abierto que nunca. El regreso del mejor nivel de Diego González será una noticia positiva para un equipo que presentó ayer en Tenerife una pareja de centrales sub-23 algo poco común en los aspirantes a ascender a Primera.
