
Fran Castillo se despidió en la tarde de este miércoles del Juventud de Torremolinos. El de Alhaurín de la Torre aterrizó en club de la Costa del Sol en la temporada 2021/22. En este 2025 se marcha del Juventud de Torremolinos y pone rumbo al Ibiza. Deja el club torremolinense después de haber vivido tres ascensos. Dos de ellos a Segunda Federación y el último vivido en este curso para lograr el histórico ascenso a la Primera Federación. El próximo curso también estará en la categoría de bronce, pero lo hará en la UD Ibiza, equipo que ha jugado el playoff en las últimas dos campañas y que hace tres militaba en Segunda División. El excanterano malaguista, visiblemente emocionado, se despidió sobre el verde de El Pozuelo en una despedida muy especial.
Muy emocionado. Sin prácticamente articular palabra. Fran Castillo derramaba lágrimas cada vez que intentaba tener recuerdos de su etapa en el Juventud de Torremolinos a la que le pone una nota de 8,5. Habría llegado al sobresaliente si el equipo hubiera evitado el descenso de Segunda a Tercera RFEF. Cree que el mejor recuerdo que se lleva del equipo blanquiverde es el «dificilísimo e histórico ascenso«.
Con el recuerdo que más se ha emocionado Fran Castillo es con el de su entrenador en las últimas temporadas: Antonio Calderón. «Siempre me ha dado una confianza especial. Vio algo en mí que no veía ni yo. Es un entrenador que ha confiado muchísimo en mí«, afirmaba con varias pausas por culpa de la emoción que tenía. Ha insistido en que lo conseguido en el Juventud de Torremolinos es histórico. «Hace 5 o 10 años en Torremolinos no se pensaban que iban a estar en esta categoría«, señalaba el propio jugador.
El CEO del Juventud de Torremolinos, Ernesto Salido, asegura que es un día «de sentimientos encontrados«. Considera que le da pena que se marche del club, pero es consciente de que se va a un proyecto donde le va a ir bien. «No sabéis la satisfacción que nos produce. Talento ha tenido siempre, aunque no solo se llega con eso. Esta aventura que inicia es importante para su carrera y seguro que va a triunfar”, señaló el propio Salido.
Fran Castillo se marcha al Ibiza después de haber marcado 44 goles en cuatro temporadas con el Juventud de Torremolinos. Ha sumado cuatro títulos: Copa RFAF, Campeón de Tercera Federación en dos ocasiones con ascenso a Segunda Federación y el campeonato de Liga sumado este año en 2ª RFEF en el grupo 4 con la épica remontada en la clasificación en las últimas jornadas con La Unión Atlético. Un jugador con mucho gol y con mucha calidad que formó parte de la cantera blanquiazul entre 2015 y 2017.

Le llega la oportunidad de marcharse al Ibiza. El club balear ha pagado la cláusula de rescisión del futbolista y el Juventud de Torremolinos se guarda un 20% de la futura venta del futbolista. «Es la oportunidad de mi vida. Es la oportunidad que tengo de dar el salto. Confiaron en mí. Me dijeron que tanto ascendiendo como no ascendiendo, Fran Castillo iba a ser nuevo jugador del Ibiza«, afirmó el propio jugador que ha reconocido que aún no ha tenido la oportunidad de hablar con su nuevo entrenador, Paco Jémez, pero sí lo ha hecho con el director deportivo de la entidad: Javi Lara.
Sobre qué espera del futuro del Juventud de Torremolinos, Fran Castillo confía mucho en el trabajo y en el proyecto que se está realizando en el club. Le desea la mayor de las suertes al club malagueño, pero también quiere que al primero que le vaya bien es a él mismo. «Espero que les vaya súper bien. Yo firmo que el Ibiza quede 1º y el Juventud de Torremolinos quede 2º«, señalaba el propio jugador.
El acto se cerró con una foto de familia de Fran Castillo con su familia y su pareja, así como, compañeros de la plantilla y trabajadores del club. Una foto en la que también ha posado los trofeos de las tres diferentes competiciones que ha ganado: la Copa RFAF, la Liga de Tercera Federación y la Liga de Segunda Federación.
Fran Castillo, entre lágrimas, se despide del Juventud Torremolinos: «Ibiza es la oportunidad de mi vida».
El Ibiza no es, deportivamente, un buen destino. Ni cuando estuvo en Segunda ni mucho menos en Primera RFEF se juega en un campo arropado por el público. El ambiente es frío y la isla, pequeña. Sólo si le pagan muchísimo merece la pena. Creo que el jugador se equivoca, pero tiene todo el derecho a intentarlo.