@Carloshernando_ | El año 2018 no comenzó para el Málaga como deseaban todos, sino que acabó de la misma forma que el 2017, con una nueva derrota. Aunque no tiene consecuencias negativas de cara a la clasificación, los de Míchel precisaban de una victoria para cambiar la dinámica y recoger buenas sensaciones de cara al encuentro del lunes contra el Espanyol.
El partido ante el Hamburgo era una prueba para todos aquellos que debían dar un paso adelante y mostrar a Míchel que pueden sumar dentro del equipo. Muy lejos de ello, pocas esperanzas tiene el malaguismo en las que apoyarse viendo el partido que disputaron los suyos, salvo ciertos minutos en la primera y segunda parte al aprovechar la debilidad defensiva del equipo alemán.
Uno de los que desaprovechó una buena ocasión para intentar pelear un puesto por ser titular es Kuzmanovic. El serbio fue el único que jugó 90 minutos de los suyos y su acierto brilló por su ausencia. El juego apenas pasó por sus botas, que perdieron además el balón en el segundo tanto de los alemanes y que volvía a dejar el encuentro cuesta arriba para los blanquiazules.
La parte positiva de todo esto es que Míchel podrá contar con Recio para el partido del Espanyol sin un minuto en sus piernas, ya que el paleño vio todo el partido desde el banquillo en el día de hoy. De cara a ese choque contra los periquitos, todo apunta a que el capitán formará una pareja junto a Iturra y otro jugador de carácter más creativo para intentar tener presencia arriba y mejorar la versión ofensiva después de lo vivido hoy.
