El Málaga CF se fue de vacaciones con una mácula en su expediente, La Rosaleda fue irregular. Los blanquiazules despiden el 2020, año muy complicado deportiva e institucionalmente, con una pequeña psicosis en casa que les ha hecho dejar escapar muchos puntos durante esta primera vuelta. Los de Sergio Pellicer se encuentran a tan solo cinco puntos del playoff a pesar de haber dejado escapar diecisiete de los veintisiete que ha disputado como local en lo que llevamos de competición. El cuadro boquerón acumula seis partidos consecutivos sin ganar como local, una tendencia que empieza a ser cada vez más habitual.
Si bien el fútbol post confinamiento ha dejado tocado a los equipos locales el problema del Málaga como local empieza a ser algo más habitual. Las cifras de los blanquiazules solo salen bien comparadas cuando se igualan a las del curso 2017-2018. La temporada del descenso a Segunda. Desde entonces no tenía el Málaga un arranque tan pobre jugando en Martiricos. Las cifras en 2020 arrojan que los blanquiazules ganaron solo ocho de los veinte partidos que disputaron en casa. Menos de la mitad de victorias y bastante menos de la mitad de los puntos en liza.
Los números en casa recuerdan más al Málaga de Víctor Sánchez, que a este de Pellicer, bien situado en la zona media alta de la clasificación. Es más, el de Castellón ha superado ese registro negativo de partidos consecutivos sin ganar en casa que obtuvo el madrileño a comienzos de la temporada pasada. Seis para el de Nules y cinco para el madrileño. Ocho victorias, siete empates y cinco derrotas es el balance que deja el año en Málaga. En resumen, el año fue irregular en La Rosaleda donde también hubo rachas positivas como la de final de curso. Cuatro partidos sin encajar y victorias ante Dépor y Alcorcón que cimentaron la permanencia.
