El mediapunta marbellí, con muchas ganas de demostrar su talento. Dani Lorenzo, ante una pretemporada clave en su carrera.
Esta pretemporada trae aroma de esperanza. Al menos en el caso de Dani Lorenzo. El ’22’ malaguista viene de una temporada aciaga. Los continuos problemas físicos han sido un lastre para el futbolista, que esperaba con ilusión su primera temporada en el fútbol profesional a plenas facultades. Pero no pudo ser. Una maldita pubalgia le ha mantenido fuera de los terrenos prácticamente toda la segunda vuelta y le ha borrado del mapa.
El centrocampista marbellí se rompió el 27 de noviembre en el Ciutat de Valencia. Un día en el que Dani Lorenzo consiguió marcar, pero donde el Málaga CF perdía por 4-2 ante el Levante. Ese día sintió como su pubis le dio un latigazo. A partir de ese día, no volvería a jugar hasta el mes de mayo. En primer lugar, el futbolista probó con un tratamiento conservador donde apostaba por el uso de células madre. Un camino donde no sintió evolución. Tras ello, fue el propio Dani Lorenzo quién decidió pasar por quirófano. Dani Lorenzo es un jugador que desde los 15 años ha arrastrado problemas con la pubalgia. Una lesión muy traicionera para los deportistas.
El miércoles 29 de enero, Dani Lorenzo pasaba por quirófano. El doctor Pedro Luis Ripoll, especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica, realizó la operación en el Hospital Quirónsalud de Murcia. La operación consistió, básicamente, en una tenotomía bilateral de desinserción de los músculos aductores largos. Tras cuatro meses de recuperación, el día 17 del quinto mes del año pudo volver a sentirse futbolista al entrar en una convocatoria. Fue ante el Sporting de Gijón. Pese a no jugar, el marbellí mantuvo la sonrisa. En la penúltima jornada del campeonato, Pellicer le puso cuatro minutos en Elche. Los únicos que jugaría en la segunda vuelta.
De esta forma terminó un curso en el que Dani Lorenzo pasó de indiscutible a desaparecido. De jugar 42 partidos en Primera RFEF a solo 12 en Segunda. Solo Luca Sangalli ha jugado menos que él en la sala de máquinas. Unos 120 minutos más ha jugado el marbellí. Hasta Ramón ha jugado más que Dani Lorenzo. Pero él ha puesto todo de su parte por cambiar esta suerte. Porque sí, la suerte se puede cambiar con trabajo. El centrocampista se machaca diariamente para volver a ser ese jugador clave en la 23-24 y un insustituible para Sergio Pellicer. El técnico es plenamente consciente del compromiso del jugador y espera poder darle el reconocimiento que merece en forma de minutos.
Con la vista puesta al próximo curso, Dani Lorenzo empieza ya su pretemporada. El día 7 de julio está citada la plantilla para volver y el objetivo del ’22’ es hacerlo llegando en las mejores condiciones posibles. Quedan unos dos meses para que arranque la competición oficial y Dani Lorenzo está convencido de que esta temporada va a ser la de su consagración en el fútbol profesional. Eso será una gran noticia para el Málaga CF. Ahora en el mercado llegarán jugadores, pero el optimismo que crece día a día en el seno del conjunto boquerón es que el mediapunta sea el gran ‘fichaje’ con respecto a la temporada 24-25.
