El Málaga CF tiene mucho interés en reforzar las bandas. El equipo de La Rosaleda sabe que carece de extremos resolutivos y ese ha sido uno de los problemas del pasado curso de cara al gol. Loren Juarros ha reconocido en su círculo cercano que los fichajes de la delantera no han funcionado, pero también que uno de los problemas del equipo ha estado en lo poco que han sumado los jugadores de banda a los números de final de curso del equipo de Pellicer. Kevin, Rahmani, Lobete, Cordero… Quitando el último, poco ha funcionado ahí en cuanto a cifras. Tanto es así que Larrubia tuvo que ser transformado a mitad de curso. Por eso, la dirección deportiva del Málaga CF trabaja en la llegada de dos extremos y será en ellos donde más énfasis económico ponga en este mercado de fichajes.
En La Rosaleda no van a pagar traspasos por ningún jugador. El club de Martiricos pagará en salarios y es por eso que está haciendo un esfuerzo en mirar incluso más allá de las fronteras de LaLiga. A estas alturas de mercado no han salido nombres, la vigilancia es extrema en que nada se filtre, pero sí ideas. El club busca entre los recién descendidos, jugadores que terminan en junio y aquellos que acaban contrato en el 2026. Ese es el perfil de una economía que ya no es tan de guerra.
Las fichas no serán un problema, según ha dejado caer Loren Juarros a los agentes con los que se ha reunido en estas dos semanas. El club hará un esfuerzo en estas dos posiciones: extremo en banda derecha y en la izquierda. Pellicer arrancará la pretemporada mirando al filial, eso sí. El Málaga CF trabaja en dos extremos que suban el nivel este mercado y el club tiene claro que tendrá que invertir en ellos. Como ya contó Radio MARCA Málaga, es una de las premisas que dieron a Sergio Pellicer.
