Loren Juarros se suma a la fórmula de los 2.050 días

La economía de LaLiga no atraviesa su mejor momento desde hace unos años. Cada vez las cantidades de dinero que se mueven en el mercado son menores. Equipos de máximo potencial en Primera División como el FC Barcelona o el Sevilla FC lo están sufriendo. Van a tener que dejar marchar gratis a Gundogan o Acuña para poder acoplar su nueva plantilla al famoso límite salarial del campeonato liguero. Si nos centramos en el aspecto económico en Málaga, esa situación se agudiza. Al-Thani saqueando al club, EREs que dejaban a futbolistas y trabajadores en la calle y, por último, una administración judicial que no permite hacer desembolsos en traspasos. De esta forma, Loren Juarros se suma a la fórmula de los 2.050 días.

De hecho, el Málaga CF no ha pagado traspaso por ninguno de los refuerzos de este mercado. Julen Lobete, Luismi Sánchez, Álex Pastor y Sergio Castel han llegado como agentes libres a La Rosaleda. Mientras que Roko Baturina aterrizó cedido por el Gil Vicente de Portugal. Y se debe valorar que cuenta, al menos, con 1,8 millones fijos del traspaso de Roberto Fernández al Sporting de Braga. Aunque el club portugués tiene el pago dividido en plazo y el primero de ellos tiene de límite hasta finales de octubre. Es decir, no debe por qué contar con ese dinero para hacer un pago.

Durante las últimas 6 temporadas, contando mercados de verano e invierno, el Málaga CF no ha pagado traspaso por un futbolista. Si ha tenido que pagar para hacerse con cesiones de diversos futbolistas como Fran Villalba (150.000€) o Sekou Gassama (250.000€). Pero esas cifras económicos son mucho más altas en el dinero que se ha recaudado en ventas durante las últimas temporadas. Contando este mercado y yéndonos hasta la 2019/20, temporada de las 18 fichas tras no lograr el curso previo el ascenso a Primera División en el playoff, el Málaga CF ha recaudado un total de 24,9 millones de euros.

Esa cuantía cercana a los 25 millones tiene la mayor parte de lo recaudado en el verano de 2019 cuando se recaudaron más de 18 kilos. Javier Ontiveros y su marcha al Villarreal fue de 7,5 millones. Ricca se marchó al Brujas y dejó 3 millones en las arcas malaguistas. Por otro lado, Michael Santos puso rumbo a Dinamarca. El Copenhague puso sobre la mesa 2,2 kilos. Después, otras operaciones que estuvieron por encima del millón, fueron los traspasos de Jack Harper, Antoñín, Jony o Rosales.

La administración judicial ahí tiene un peso importante. En el momento que José María Muñoz toma el mando judicial del club, la situación económica era límite. En su momento, salvó un match ball, pero en la actualidad ese inmovilismo desde el prisma judicial también provoca que el Málaga CF no pueda ser más ambicioso en el mercado. Y desde el club, mediante patrocinios, gran campaña de abonos, el regreso a los derechos televisivos del fútbol profesional, han provocado que el límite salarial esté por encima de los 7 millones. Cifra para ser cautos a la hora de acometer pagos por traspasos.

De hecho, hace 2.050 días que el equipo blanquiazul no paga dinero por un traspaso. Sí lo ha hecho por cesiones. Pero el último jugador que llegó a Málaga previo pago de traspaso fue Yehven Seleznyov. El ucraniano llegó por medio millón de euros al Málaga CF. Una petición de Muñiz que confiaba en el delantero después de haber coincidido en el Dnipro de Rusia durante dos temporadas y media. Fichaje que acabó siendo un absoluto fracaso. De esta forma, Loren Juarros se suma a la fórmula de los 2.050 días.