La primera línea malagueña, de 23 años, vuelve al club después de una experiencia en el Salma Adesal
Bárbara Piñeira Calero (Málaga, 2002) es el tercer fichaje del Costa del Sol Málaga para el proyecto 2025/2026. La benalmadense, de 23 años y 1.77 metros, vuelve a casa meses después. Tras una temporada en el Salma Adesal regresa al club, con el que se compromete hasta el 2026. Ahí se inicia la segunda etapa de la joven con las panteras, donde tendrá un papel de mucha trascendencia en la primera línea. Se une en el capítulo de refuerzos a Martina Romero y Rita Campos, con las que se da empaque al nuevo plantel, donde se mantendrá el núcleo duro del ciclo dorado.
«Me hace mucha ilusión regresar a la que fue mi casa la temporada pasada. Estoy con muchas ganas de seguir aprendiendo y de aportar al equipo todo lo que esté en mis manos. De esta nueva etapa en el club espero poder disfrutar, crecer y contribuir al máximo al equipo, tanto dentro como fuera de la pista. Vuelvo con mucha ilusión y con la mentalidad de seguir aprendiendo cada día. La jugadora que regresa no es la misma que se fue: más madura, fuerte y comprometida», asegura la malagueña, que llega con hambre: «He trabajado mucho durante este año y considero que estoy en un estado físico y mental mucho más sólido y fortalecido que el año pasado».
Después de formarse en el Balonmano Maravillas en la etapa de base, Piñeira llegó al Costa del Sol Málaga en primer año senior. Habitual en categorías inferiores de la selección española (también es internacional en balonmano playa) tuvo una aparición estelar en el primer equipo siendo parte de la plantilla que ganó la Copa de la Reina y la Supercopa de España en 2020. Después de continuar su desarrollo en el Antequera Costa del Sol, filial en División de Honor Plata, volvió a dar el salto el curso anterior a las órdenes de Suso Gallardo. Subcampeona de la Supercopa Ibérica, tomando más minutos en la Liga Guerreras Iberdrola y debutando en la EHF European League.
En el conjunto cordobés ha continuado su crecimiento, donde además ha dado un paso adelante en la faceta defensiva. No ha descuidado la ofensiva, donde se encuentra en el top 20 de goleadoras de la División de Honor Oro con 101 en 24 partidos. Una jugadora versátil que ahora tiene una nueva oportunidad en su casa. «Creo que puedo aportar compromiso, energía y muchas ganas de seguir creciendo junto al equipo. Vengo con una actitud muy positiva, con más confianza en mí misma y con la intención de sumar siempre, ya sea en la pista o desde fuera y preparada para dar lo mejor de mi en cada momento», finaliza. Bárbara Piñeira y el Costa del Sol Málaga caminan otra vez de la mano.