Carlos Alcaraz ha protagonizado este domingo un auténtico hito en la historia del tenis al lograr revalidar el título en Roland Garros, derrotando al número uno Jannik Sinner en la final más épica jamás vista en la tierra batida parisina. Tras un duelo que se extendió por 5 horas y 29 minutos —la final más larga en la historia del torneo— Alcaraz se impuso con un marcador de 4‑6, 6‑7(4), 6‑4, 7‑6(3), 7‑6(10‑2), completando una remontada histórica desde dos sets en contra.
La sombra de la derrota planeaba sobre el murciano desde el inicio. Sinner fue letal en los primeros instantes, llevándose el primer set por 6‑4. En el segundo, ganó también por 7‑6, amenazando con construir un triunfo imparable . Sin embargo, Alcaraz mostró una resistencia inquebrantable: en el tercer set volvió a romper el servicio del rival para igualar el choque 6‑4, atravesando el ecuador del encuentro con renovada confianza.
El cuarto set fue un torbellino emocional. Sinner alcanzó tres bolas de partido con ventaja de 5‑3 y 0‑40 en contra de Alcaraz. Con una mezcla de nervios de acero y golpes magistrales, el español las salvó una a una, forzó el tie‑break y venció 7‑6(3), forzando así un decisivo quinto set. En la manga definitiva, ambos intercambiaron breaks, pero en el super tie‑break Carlos dominó con claridad (10‑2), desatando un delirio en la Philippe Chatrier y dejando una imagen para los anales del deporte.
Con este triunfo, Alcaraz no solo suma su segundo Roland Garros consecutivo, sino que alcanza su quinto Grand Slam en apenas 22 años y 34 días, convirtiéndose en el tercer hombre más joven en lograrlo en la Era Abierta, solo por detrás de Björn Borg y Rafael Nadal