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La tensión que se soporta luchando por la permanencia solo es comparable a la que soporta el que quiere ser campeón. No poder fallar es una premisa que no todo el mundo puede aguantar. Cuando el objetivo se acerca. Los vellos se ponen de punta y el pulso a más de 100. Fue lo que se vivió en La Rosaleda con el gol de Hicham. Pellicer se lo había jugado todo a una carta y ésta fue la ganadora. Una foto, un gol y un abrazo. El de Manolo Sánchez con Pellicer en la zona técnica del banquillo.
El segundo entrenador malaguista lo revivía ">en su cuenta de Twitter. “No hay palabras que describan la emoción, esfuerzo y carácter de este equipo. Orgullosos de cada uno de ellos. Cada vez más cerca del objetivo. Seguimos”. Así de contundente se expresaba Manolo Sánchez 24 horas después del importante triunfo de los malaguistas. Una foto, un gol y un abrazo. Y de paso media permanencia en Segunda. El trabajo siempre tiene su recompensa. La foto del momento, captada por Pepe Ortega de manera sobresaliente, es ya historia de este curso.
?ref_src=twsrc%5Etfw">July 9, 2020No hay palabras que describan la emoción, esfuerzo y carácter de este equipo. Orgullosos de cada uno de ellos. Cada vez más cerca del objetivo. Seguimos.
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El abrazo icónico de Sánchez y Pellicer // Pepe Ortega MCF