Siempre se tirará de alma para afrontar unas semifinales de Liga Endesa. Más aún con necesidad de victoria para seguir con vida. El Unicaja se plantará este domingo 15 de junio en el Carpena para jugar la última carta que le queda. El sueño de remontada no se esfumará hasta que el árbitro pite el final en una hipotética derrota en el tercer choque. No obstante, la moral llega tocada. Los de Ibon Navarro no han conseguido imponerse en ninguno de los dos primeros duelos en el Movistar Arena. Y, aunque el nivel mejoró notablemente en el segundo asalto hay muchos detalles importantes que pulir. Uno de ellos es claro. Así, las pérdidas, talón de Aquiles del Unicaja en semifinales.
El Real Madrid ha conseguido neutralizar el característico juego cajista en la mayor parte de ambos duelos. Sin control del partido, ni presencia del alto ritmo que suelen protagonizar, con casi ningún contraataque… Irreconocibles en muchos momentos los malagueños, que han sumado entre los dos partidos 36 pérdidas, 10 más que las de su rival. Prácticamente, la misma diferencia en contra que en lo que ha recuperaciones se refiere, 15 de los verdimorados y 24 de los blancos.
En el debut de semifinales, donde se vio a un Unicaja completamente sobrepasado y sin opciones desde el primer cuarto, fueron 14 las pérdidas que sumaron los de Ibon Navarro. Tan solo contrarrestadas por 4 recuperaciones, todas en la segunda mitad. La defensa de los malagueños no pudo seguir la estela madrileña. Mientras, el ataque fue de menos a más pero aún con muchos problemas en el planteamiento.
El último enfrentamiento, aunque tuvo a un Unicaja claramente mejor del que se vio el pasado miércoles, dejó datos difíciles de casar con la victoria. La defensa fue bastante buena en la primera mitad. Chispazos también en la segunda parte permitieron que el equipo consiguiese recuperar 11 balones. No obstante, era muy complicado de equilibrar con las 22 pérdidas finales, cinco de ellas de equipo. Malas decisiones, provocadas por precipitaciones de los que suelen ser seguros de vida como Tyson Carter (5), Kendrick Perry (3) o Tyson Pérez (2) empinaron, aún más, la cuesta.
De esta forma, si el Unicaja quiere tener opciones de alargar la serie necesita ajustar tuercas en estos aspectos, entre otros. Las pérdidas dan oportunidades fáciles a los madrileños, que saben cambiar muy bien el ritmo de partido. La moral va a ganar en solidez cuando se reduzcan esos errores. Al igual que con presión alta, característica de los verdes, los errores blancos se verán forzados. Eso se traduce en transiciones rápidas, con situaciones de ventaja para los malagueños.
Así, por ahora en estas semifinales, las pérdidas, talón de Aquiles del Unicaja en semifinales.
