Unicaja volvió a a la senda de la victoria ante el Fuenlabrada. La primera de Ibon Navarro (53-73). El coach vitoriano estrenó su casillero de victorias en un partido donde aparecieron todas las versiones posibles de los malagueños. Matt Mooney fue clave para tumbar a un Fuenlabrada que llegó a remontar casi 20 puntos de desventaja en el tercer cuarto, pero que acabó desinflado en el último acto. Unicaja se va a su particular parón con la sangría de derrotas de la era Katsikaris frenada. Fuenlabrada tendrá que seguir luchando por ir encarrilando su permanencia en ACB.
El Unicaja comenzó el partido con mucha seriedad defensiva. Los de Ibon Navarro iniciaron el partido con un parcial de 2-9 en el que Abromaitis y Jonathan Barreiro tiraban del carro cajista en ataque. Alberto Díaz se sumaba a la fiesta con un buen triple y la renta del Unicaja iba en aumento con el paso de los minutos. La defensa era otra cosa con respecto a anteriores jornadas. Dejan Kravic estaba superlativo en la pintura y los malacitanos se marchaban con nueve puntos de renta al final de los primeros diez minutos reglamentarios (11-20).
El arranque del segundo cuarto fue espectacular para el Unicaja. Francis Alonso y Alberto Díaz empezaban muy bien desde la línea de triples y los de Ibon Navarro se iban en el marcador. Dejan Kravic en el juego interior y Mooney junto a Abromaitis en el exterior hacían diabluras sin que el Fuenlabrada diese con la tecla para frenar a los cajistas que se disparaban. Brizuela ponía la guinda a un cuarto sensacional y el marcado se quedaba en 19-41 para el cuadro de Los Guindos. Sin duda, uno de los mejores cuartos del curso para el cuadro del Carpena. La superioridad interior del equipo de Ibon Navarro se unía a las pérdidas locales (11) y su bajo acierto en ataque para crear la tormenta perfecta.
El tercer cuarto arrancó con el Fuenlabrada despertando. Samar anotó el primer triple del partido para los madrileños y Meindl comenzó muy inspirado. Unicaja no daba con la tecla y la inspiración cajista se iba por el retrete a la misma velocidad con la que el cuadro local seguía recortando distancia con un Samar muy enchufado en el juego exterior. Los malagueños estaban desconectados e incluso el equipo de Los Guindos cometía una falta de cinco segundos en saque de fondo prueba de desajuste que sufría el equipo. Leo Meindl seguía percutiendo y el parcial ya era de 15 puntos a dos (35-43). El Fernando Martín era una caldera y Unicaja sufría mucho. Mooney, con dos acciones ofensivas, ponía fin a la espectacular racha madrileña. Si no fuese por el estadounidense, los costasoleños se hubiesen hundido. Fuenlabrada dejó en 10 puntos la desventaja justo al final. (40-50)
Mooney era el salvavidas de Ibon Navarro. El base norteamericano tiraba del carro en el momento más delicado del partido. La mejor versión defensiva del Unicaja apareció de nuevo en el último acto. Brizuela sumaba intangibles y Mooney puntos. En el Fuenlabrada, la magia de Meindl se apagaba en ataque y los de Josep Raventós se quedaban persiguiendo la estela cajista. Otra vez culpa de las pérdidas. Una vez superado el mal trago del tercer cuarto, el Unicaja fue cocinando su victoria poco a poco en una de las canchas más complicadas de la zona media baja de la ACB. (53-73). Brillante victoria de Unicaja ante un Fuenlabrada que hizo su peor anotación del curso.
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Como cambia la actitud de algunos jugadores con el cambio de entrenador. Parece que se respira aire limpio y fresco y hay otra disposición. Ahora hay que entender el nivel ofrecido en la pista de fuenlabrada. Tiempo hay ahora para hacer retoques tácticos y de sistemas.