@JuanjeFernandez || Unicaja cayó derrotado en el Buesa Arena en un partido en el que el equipo de Plaza nunca llegó a sentirse cómodo. La derrota ante Fenerbaçhe del Efes había dado esperanza a ambos conjuntos que se jugaban la vida en tierras vascas. El pulso tembló menos para los locales que en unos minutos finales de infarto estuvieron mucho más acertados. La derrota deja al equipo cajista con un 1-6 muy difícil de remontar, en un segunda vuelta que se hará larga para los malagueños.
Unicaja comenzó defensivamente bien, intentando emular las dos anteriores victorias ante el Baskonia en la presente temporada. Vasileiadis abrió el marcador con un impresionante triple, pero Caja Laboral reaccionó pronto y devolvió la canasta desde la línea de 6,75. La igualdad era máxima en el primer cuarto en el que las canastas volaban de uno a otro aro. Dos pérdidas de balón consecutivas llevaron a cinco la renta del Caja Laboral, pero Plaza con un tiempo muerto paró la sangría. El rebote ofensivo mantenía con vida a los malagueños que no perdían de vista el partido gracias Caleb Green, cuando Baskonia volvía a marcharse de cinco en el marcador. Con seis de ventaja para los locales, se llegó al final del primer acto (27-21).
Tras el primer cuarto, los de Plaza llevaron el partido a su terreno. El guión de los pocos puntos servía para estrechar la ventaja del Caja Laboral que veía como Carlos Súarez se convertía en un muro imposible de saltar, el madrileño aportaba arriba y atrás. Con esta nueva perspectiva el partido se puso de nuevo en tablas después de seis minutos de segundo acto. El tridente Golubovic-Vázque-Súarez funcionaba, aunque cuando el gallego se sentó por rotación, la puntuación de los vascos se volvió a disparar. Toolson y Granger sujetaban a Unicaja que llegó con una desventaja de tres al descanso (44-41).
El tercer cuarto comenzó con un triple de Thomas que durante los primeros minutos de este acto tiró del carro de los cajistas que con una canasta, tras una técnica a Adams, de Golubovic llegó a ponerse por delante. La falta activó a los locales que endosaron un parcial de 11-2 con San Emeterio, Causeur y el propio Adams anotando desde la marca de tres. El penúltimo acto se cerró con una canasta de Granger que dejó el electrónico en un 65-58.
El último cuarto no tuvo dueño. Ambos equipos anotaban sin bajar de entre los siete y diez puntos la renta del Caja Laboral. Los últimos minutos dieron esperanza a un Unicaja que comenzó a presionar muy arriba. Dos canastas consecutivas de Vasileiadis metieron a los de Plaza en el partido dejando la diferencia en cuatro. Con todo para ponerse a dos, el espejismo se vino abajo. Granger perdió una bola decisiva y Adams colocó la guinda a la victoria local con un triple que supuso la puntilla para el equipo de Los Guindos que perdió y dijo adiós a la Euroliga de forma dramática. (79-74).
