FUE BONITO MIENTRAS DURÓ

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Pere Milla celebrando el 1-0 | LaLiga

@FranBerrocal99 || El Elche venció al Málaga por dos goles a cero en el duelo correspondiente a la jornada 26 de Segunda. Los tantos de Pere Milla y Dani Escriche, diana validada por el VAR, confirman el buen estado de forma del equipo ilicitano que escala hacia el quinto puesto de la clasificación. Fueron nueve partidos los que aguantó el cuadro boquerón sin perder.

 

Un Málaga que comenzó muy activo en los primeros compases del choque con dos ocasiones manifiestas de gol: un balón en el área pequeña que Sadiku no pudo rematar y el latigazo de Hicham que hizo lucirse a Edgar Badía. Por su parte, los soldados de Pacheta fueron de menos a más. Muy activo Josan todo el partido desde el costado derecho buscándole las cosquillas a Juankar, al igual que Fidel por el franco izquierdo.

 

Una falta de Pacheco que se marchó por encima del marco ilicitano fue la acción previa al primer gol local. Conducción de Fidel que abrió el esférico a la banda izquierda, donde se encontraba un Juan Cruz que puso en bandeja el gol de Pere Milla –cuarta diana del catalán esta temporada-. Desde este momento, la contienda se puso muy cuesta arriba para el conjunto visitante.

 

El gol en contra no fue el único dolor de muelas para los de Pellicer. Juankar tuvo que ser sustituido pasada la media hora por unas molestias en la parte trasera de su muslo derecho. En su lugar, Antoñín con el 19 a la espalda y renovado hasta 2023. Con este ambiente e improvisando con Luis Muñoz en el lateral zurdo, el colegiado señaló el camino de los vestuarios con la victoria momentánea de los blanquiverdes.

 

La reanudación no despertó a los pupilos de Sergio Pellicer. El Elche comenzó recurriendo a la posesión del balón sin exponerse a ningún síntoma de peligro malacitano. Las internadas de Fidel y Josan no cesaron. Fueron una amenaza constante para Munir y la zaga visitante. El Málaga tardó un cuarto de hora en ver portería. O al menos intentarlo. Falta lejana ejecutada por Juanpi que no obligó a actuar al guardameta vestido de rojo.

 

El disparo de Antoñín que fue manso hacia los dominios de Edgar Badía minutos más tarde y poco más. A los de Martiricos no les sonó el despertador. O no lo escucharon. Y llegó la acción que mató y puso vista a sentencia. Otra internada de un imperial Juan Cruz que facilitó la individualidad de Dani Escriche para superar a Munir y poner el 2-0 definitivo en el electrónico. Un gol que tardó más de la cuenta en darse, pero el VAR lo aprobó.

 

Últimos minutos de un partido muerto que el Elche consiguió cerrar. Tres puntos para mirar hacia arriba y soñar. ¿Los blanquiazules? Al filo de la navaja y pensando en la noche del domingo que viene, cuando recibirán en La Rosaleda a un Numancia que vive en la zona cómoda de la tabla. Lo dicho. Fue bonito mientras duró.