@Danielnz97 || La jornada no le pudo ir peor al Málaga. O quizás sí. Lo cierto es que, en el derbi contra el Cádiz, no consiguió sumar. Y eso siempre es una mala noticia. Pero cuando a uno le van mal las cosas, espera al menos que a los rivales no le vayan mucho mejor. En este aspecto, los blanquiazules pueden celebrar el gol del Huesca en el último instante del choque frente al Racing (1-1), que ya saboreaba la victoria, y la derrota del Deportivo de la Coruña, que cayó en Las Palmas de Gran Canaria (3-0) a pesar del relevo en el banquillo.
De haber ganado, el conjunto de Víctor Sánchez del Amo hubiese salido del descenso y habría empatado a 11 puntos con otros tres equipos más: el Tenerife, el Sporting y el Mirandés. Pero la derrota frente al cuadro amarillo hace que el Málaga, que se había mantenido en ese décimo noveno puesto durante varios días, incluso con la derrota en Huesca, caiga hasta la penúltima posición con la misma cantidad que el Dépor (ocho).
Hasta el momento, la salvación era una cuestión de goles. El Málaga tenía los mismos puntos que el Racing de Santander y (otro) empate en Huesca, por ejemplo, podía llegar a valer para abandonar las posiciones rojas. No hubiese sido así en esta jornada porque los de abajo han logrado sacar resultados positivos y solo la victoria en el derbi habría elevado al cuadro de Víctor por encima del descenso.
La permanencia está ahora en 10 puntos. Y el cuadro de la Costa del Sol suma dos menos, como el próximo rival. El triunfo en Riazor podría ser suficiente para coger algo de oxígeno y dormir durante casi una semana en posiciones de permanencia. Tendrá que cumplir el Málaga y, a partir de ahí, esperar resultados negativos del Racing de Santander, el Lugo y el Oviedo.