@Carloshernando_ | La temporada 2017/18 del Málaga siempre estará en el recuerdo del aficionado por la cantidad de errores que se vivieron desde que arrancó el curso en verano; fichajes sin nombre y sin el beneplácito del director deportivo, una pretemporada repleta de derrotas y un rendimiento de jugadores muy lejos de las expectativas creadas y que acabaron rompiéndose en el Ciudad de Valencia contra el Levante cuando se consumó el descenso a Segunda División.
Si la defensa fue un quebradero de cabeza para cualquier seguidor blanquiazul, la delantera tampoco se salvó de la quema. Borja Bastón llegó como sustituto de Sandro y ni una vez quiso serlo, consolidando su nombre en el banquillo y en la grada blanquiazul cuando alternaba partidos como titular y fuera de la lista de convocados.
Junto a él, hubo otros cedidos que llegaron, más tarde o más temprano, pero que todos se acabarán yendo en busca de nuevos clubes, como es el caso de un Ideye que apareció tan solo contra Las Palmas, Success, uno de los más criticados por su estado de forma, Peñaranda, que nunca marcó un gol con el Málaga, Alberto Bueno, que demostró en los minutos sobre el campo sus "ganas" de seguir aquí, Diego Rolan, que continúa negociando su futuro tras un año decente y demostrando haber sido el mejor de los delanteros. Por último, Samu García, que llegó cedido del Levante para permanecer en su casa si el club lograba la permanencia, pero que con su rendimiento será difícil convencer a la dirección deportiva.
Caminero se encuentra de esta forma con dos únicos delanteros en su nómina. Uno es Youssef En-Nesyri, revalorizado tras el Mundial de Rusia con su tanto a España y con una bajada de la cláusula de rescisión que se redujo a la mitad, es decir a 10 millones, tras el descenso a Segunda. Una de las ofertas que tiene el club sobre la mesa es del Eibar, aunque está descartada por ser muy baja. A pesar de ello, la entidad de Martiricos vería con buenos ojos la salida del marroquí si se ingresa una buena cantidad de dinero.
Y junto a él está Michael Santos. El uruguayo no pudo triunfar en su primer año en Málaga, aunque mejoró sus estadísticas en el Sporting de Gijón anotando 17 goles y dando cuatro asistencias para convertirse en uno de los mejores atacantes de la categoría. Una cláusula que le impide seguir con los blanquiazules en Segunda le obliga a salir y por ello el club aceptó una oferta del Copenhague cercana a los cuatro millones de euros a la espera de lo que responda el River Plate uruguayo, que posee el 30% del pase del jugador.
Por tanto, la faceta ofensiva necesitaría un lavado de cara para el próximo curso viendo cómo se están desarrollando las operaciones en este mercado de verano y atendiendo sobre todo al rendimiento de los efectivos del año pasado, un factor que obliga a la dirección deportiva a no repetir los fallos del pasado para regresar lo antes posible a Primera División y consolidarse de nuevo allí.
