Como un niño con las botas nuevas…

Quizá antes de lo esperado. Pero cuando más lo necesitaba el equipo, tras una horrible primera parte en la que se fue perdiendo solo por 0-1 ante el Linares Deportivo, Ramón dijo aquí estoy yo de regreso para el Málaga. Pellicer estaba muy descontento con el nivel mostrado por sus futbolistas en los primeros 45 minutos y necesitaba de soluciones. Optó por un triple cambio. Dentro de ellos estaba Ramón Enríquez. El de Órgiva recibió la ovación más calurosa de una fría y lluviosa tarde de domingo.

El centrocampista granadino brindó un gran nivel en la segunda parte siendo de los jugadores que tuvo mayor capacidad de batir líneas del rival a través de pases. Un día que nunca olvidará Ramón que 343 días después volvió a sentirse futbolista tras su lesión la pasada temporada en Lugo. Un pequeño clinic de pases, de aquellos a los que nos acostumbraba en el pasado.

Dotó al equipo de más control y calidad en el centro del campo. Juanpe volvió a estar mal y se quedó en la caseta. Manu Molina vivió uno de sus partidos más imprecisos de las últimas fechas. Ahí apareció Ramón que supo mover la pelota de lado a lado y fue importante para que el Málaga pudiera meter atrás al Linares Deportivo en los últimos minutos de encuentro en busca del tanto que hubiera dado la victoria. De hecho, el propio jugador reconoció que se sintió «mejor de lo que creía». En la grada, pocos esperaban ese rendimiento tan repentino del centrocampista. Una pequeña dosis del Dr. Pase.

Un día muy especial. Lo más bonito para el jugador llegó tras el partido y a pesar del empate. Toda la familia de Ramón se desplazó hasta La Rosaleda para verle reaparecer. De hecho, durante todo el tiempo de baja ha sido un apoyo fundamental. El ‘6’ del Málaga CF ha pasado un último año muy complicado. Se mostró muy contento con su regreso, pero advierte de que «con estas lesiones hay que ir con pies de plomo». Aún así, espera que siga este ritmo ascendente y poco a poco «puedan ser más minutos» los que tenga sobre el terreno de juego. El Málaga estuvo como un niño con mediocentro nuevo.

🤍 𝑵𝒂𝒅𝒂 𝒄𝒐𝒎𝒐 𝒆𝒍 𝒂𝒃𝒓𝒂𝒛𝒐 𝒅𝒆 𝒖𝒏𝒂 𝒎𝒂𝒅𝒓𝒆 💙 pic.twitter.com/NsRdrG9SHv

— Málaga CF (@MalagaCF)

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Esta alegría de Ramón fue compartida también por Pellicer y Roberto. El técnico de Nules asegura que le costó un poco entrar, pero una vez entró al ritmo de juego «le daba sentido a todas las jugadas». El entrenador malaguista es consciente que la mejor noticia que deja el empate ante el Linares es el regreso de Ramón. A pesar del resultado, Pellicer admite que «ha estado a buen nivel». Por otro lado, Roberto considera al de Órgiva como «un hermano». «Cuando lo vimos saltar al campo nos alegramos todos. Ha mejorado el juego del equipo«, reconocía el pichichi malaguista con una sonrisa cuando le preguntaron por Ramón en la sala de prensa.

En este encuentro tanto Genaro como Dani Lorenzo fueron bajas. Juanpe tuvo una nueva oportunidad que no supo aprovechar. Sangalli fue superado a la hora de entrar al campo por un Ramón con casi un año de inactividad. Seguro que Pellicer le dará más minutos aún con el paso de los partidos. Sin lugar a duda, la noticia más positiva del tropiezo del Málaga ante el Linares Deportivo es la del regreso de Ramón, el retorno más esperado 343 días después.

Ramón aplaude a la grada de La Rosaleda en el día de su regreso // Foto: Javier Díaz