El mercado de fichajes tiene estas cosas. Numerosos nombres circulan, tanto de entrada como de salida, en las listas de los equipos que conforman la Segunda División española. No es para menos en Martiricos, cuya anecdótica bonanza económica parece estar cambiando la tendencia, pues el Málaga CF lo apuesta casi todo al exterior.
En las últimas temporadas en La Rosaleda, un patrón era coincidente: los canteranos estaban salvando los muebles. Si bien es cierto que en su mayoría ocurría por necesidad, la política del club giraba en torno a sacar el mayor provecho posible de los activos de ‘La Academia’. Con Pellicer al frente y una sanción en cuanto a las fichas profesionales se refiere, dejaron al equipo en una posición bastante más favorable que la obtenida el pasado curso.
Pues bien, todo esto parece haberse cortado de raíz. El éxodo en la cantera se está haciendo notar, y muchas son las piezas que abandonan el barco. Alberto Quintana, Álex Benítez o Julio Martínez son los ejemplos más relevantes dentro del filial malaguista. Los tres sumaron minutos con el primer equipo, en mayor o menor cantidad, en momentos de necesidad deportiva. Este verano terminaron su contrato y, sin más oportunidad, decidieron saltar por la borda. Hoy, tal y como ha podido confirmar Radio MARCA Málaga, otro nombre se separa de forma temporal del Málaga CF. Roberto Fernández pone rumbo a la cantera culé, y será jugador del FC Barcelona B en calidad de cedido el próximo curso.
Una serie de nombres que certifican que el Málaga lo apuesta casi todo al exterior, pues a excepción de jugadores como Dani Lorenzo, Andrés Caro, Kevin Medina o Haitam, el foco se encuentra en traer jugadores desde fuera. Veteranía y experiencia para contrastar con el método utilizado antaño. Un cambio de ciclo que parece estar llegando a su cúspide.
Ni abandonan el barco ni saltan por la borda… más bien los echan.
Y eso que tenemos una Academia de Sobresaliente, ¿eh, Duda?
Si, sobre todo saliente