Una montaña rusa para el Málaga CF

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Foto: MCF

Fin del 2021. Un año que ha supuesto una metamorfosis para el club de Martiricos y que ha dejado penas y glorias en muchas tardes de fútbol para el conjunto malagueño. Una montaña rusa de resultados que, mes a mes, ha ido reflejando la situación que atravesaba el Málaga CF.

Enero

El año arrancaba el día 3 de enero. El equipo de Sergio Pellicer comenzó con un empate en campo del Albacete, sinónimo del equilibrio que tendría el resto del mes. Una victoria en Copa del Rey ante el Oviedo, un empate en liga también contra los asturianos y una derrota en la copa ante el Granada configuraban el arranque. Para cerrar enero, un tropiezo ante la Ponfe y una victoria en Santo Domingo contra el Alcorcón.

Febrero

El segundo mes del año solo gozaría de tres partidos. Y vaya encuentros. Un saldo negativo de dos derrotas y una victoria. El club blanquiazul hincaría la rodilla frente a Zaragoza y Sporting, aunque conseguiría salir del hoyo con un triunfo frente al Rayo Vallecano.

Marzo

El mes del equilibrio absoluto. Marzo terminó con un balance de dos derrotas, dos empates y dos victorias. Arrancaría con una derrota en Anduva frente al Mirandés. Después, dos victorias consecutivas frente a Sabadell y Logroñés seguidas de dos empates ante Tenerife y Cartagena. Para cerrar, la derrota más abultada en lo que iba de año: un 0-3 frente al Almería.

Abril

Cuatro encuentros con un saldo positivo. La calma antes de la tormenta. Dos victorias consecutivas para abrir el mes, ante Lugo y Albacete. Por contra, un empate contra Las Palmas y una derrota frente al Fuenlabrada cerrarían ese mes para poner los cimientos de mayo.

Mayo

El último mes de competición de la temporada 21/22 fue el más turbulento para el Málaga CF. Los de Pellicer tuvieron el peor saldo de la segunda vuelta, con un balance de cuatro derrotas, un empate y una victoria. Comenzó cayendo frente al Espanyol, empatando ante el Mallorca y concatenando una racha de tres derrotas más ante Oviedo, Girona y Leganés. No obstante, el curso cerraría con la victoria 3-0 ante el Castellón.

Un verano de reestructuración e ilusión a partes iguales

El período estival fue una época de sentar cimientos. Los de un curso 21/22 que desde junio ya apuntaba maneras. Fichajes por doquier desde ‘La Cueva’ dirigida por Manolo Gaspar y la salida de una situación económica y deportiva que ilusionaba.

El cambio en el banquillo también fue un evento significativo, con la salida de Pellicer y la llegada de José Alberto López. Además de ello, los refuerzos económicos se materializaron en la llegada de 11 fichajes que cambiaban la situación del curso anterior.

Agosto

El arranque del nuevo curso fue de buen juego y poco resultado. Dos empates ante Mirandés e Ibiza suponían el inicio del campeonato, acompañados de una victoria ante el Alcorcón.

Septiembre

El peor mes en lo que va de competición. Almería fue el primer varapalo, con una derrota inesperada tras el despliegue de juego del equipo. Una victoria ante el Girona camuflaba las sensaciones, y dos derrotas consecutivas terminaban de bajar las expectativas iniciales. La debacle en Ponferrada y otro bache ante el Sporting cerraban el mes.

Octubre

El balance fue positivo, con tan solo una derrota en seis encuentros. Victoria ante el Fuenlabrada, tres empates consecutivos con Valladolid, Zaragoza y Huesca, un nuevo triunfo frente al Lugo y la derrota en Oviedo que terminó con esa buena racha.

Noviembre

Seguramente fue el último período en que las sensaciones fueron buenas. Tres victorias y dos derrotas. Un primer triunfo ante el Sanse, una derrota que dejó sinsabores en Cartagena y dos espectaculares victorias ante Tenerife y Las Palmas en La Rosaleda. No obstante, la línea irregular del equipo dejó una derrota humillante en Burgos.

Diciembre

El mes más aciago hasta la fecha, sobre todo por sensaciones. Tan solo una victoria, la inicial frente al Peña Sport de Tafalla en Copa del Rey. Tras ella, una derrota sorprendente en casa contra el Amorebieta para cortar la racha de buenos resultados en La Rosaleda. Un empate en Eibar bajo mínimos fue la antesala de la debacle final. La eliminación copera frente al Rayo Majadahonda y la segunda derrota consecutiva en Martiricos, esta vez ante el Leganés.

Año nuevo, ¿guion nuevo?

Así, 2022 se presenta como un año en que acabar con las irregularidades que han caracterizado al equipo en 2021. Pellicer y José Alberto han combatido contra adversidades que han dejado al equipo en un ostracismo general, pero aún hay capacidad de reacción en una de las competiciones más baratas de los últimos años. Toca dejar atrás la montaña rusa de resultados para el Málaga CF.

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