EL 1×1 DE LOS JUGADORES DEL MÁLAGA ANTE EL CÁDIZ

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Los jugadores del Málaga celebran el gol ante el Cádiz con la grada || Marilú Báez

MUNIR  (6):  Apenas tuvo trabajo bajo palos. Dudó en pequeño balón aéreo pero por lo demás solventó con aprobado un partido en el que volvió a dejar la portería a cero cinco partidos después.

 

CIFU  (7): De menos a más con el paso de los minutos. Se mostró seguro en defensa donde una vez dio un recital de esfuerzo y coraje. Aplaudido por La Rosaleda.

 

DIEGO GLEZ  (6): Estuvo solvente durante todo el partido. Bien por arriba y algo expeditivo cuando el partido lo pidió. Sigue mejorando en su posición provisional.

 

PAU TORRES  (6): Algunos fallos en el inicio del partido levantaron las dudas sobre la figura del joven central. Fue creciendo con el paso de los minutos. 

 

RICCA  (7):  Gol de la victoria para resarcirse de los fallados ante el Nástic. Cumplió en defensa demostrando que su banda sigue siendo terreno prohibido para los rivales.

 

N’DIAYE   (7): Recuperó sensaciones físicas sobretodo. El senegalés fue un muro que el Cádiz fue incapaz de superar. Le falta algo más de velocidad con el balón en los pies. 

 

ADRIÁN    (7): Muy seguro durante todo el partido. Dirigió a su ritmo al equipo y ganó una infinidad de balones por arriba. 

 

PACHECO   (5): Paso inadvertido durante la mayoría del tiempo. En la segunda parte asomó algo más por la portería a rival pero no fue suficiente para mantener su nivel de Mallorca. 

 

JUANPI    (6): El venezolano mejoró sensiblemente. En el segundo tiempo pidió la pelota y tuvo el 1-0 en sus botas. La Rosaleda le aplaudió.

 

LESCHUK    (6): Trabajo y más trabajo para el argentino. No tuvo el perfume de gol pero su lucha incansable fue desgastando poco a poco a la defensa cadista.

 

HARPER   (7): Se inventó una asistencia de oro para ganar el partido. Al igual que Leschuk peleó durante todo el partido y provocó muchos errores en la zaga del equipo de Cervera.

 

ONTIVEROS   (7): Su entrada al terreno de juego sacó al equipo de su letargo. Protagonizó varias acciones individuales de mucha calidad y todo lo que pasó por sus botas tuvo criterio. 

 

RENATO   (S.C): Sin tiempo

 

LOMBÁN   (S.C): Sin tiempo