GRITAR AHORA CONTRA AL THANI ES DEMASIADO TARDE

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La estrofa de la canción de Joan Manel Serrat "nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio" viene ahora al pelo para definir la situación actual del Málaga CF.

 

Hace ya cinco  temporadas que vengo advirtiendo sobre Al Thani, presidente de nuestro club, a los oyentes de MÁLAGA FM-RADIO MARCA y a los lectores de MARCA. Las tropelías, deudas generadas por su inversión, desamortización de la misma para rebajar esa deuda, política de cantera desastrosa y perjudicial para todo el fútbol base malagueño, un director deportivo que no da una y, en general, un jugar con fuego permanente, nos ha hecho estar al borde de la desaparición como club cuatro veces en las últimas cinco temporadas.

 

La gestión de Al Thani, sus ridículos permanentes, sus graves errores por acción o por omisión, los Twitter de sus hijos y de él mismo y la prepotencia en grado sumo hace ya mucho tiempo que han sido denunciados en nuestra casa con el silencio permanente de sus palmeros, o sea medios de comunicación que pelotean a todo aquel que ha estado junto o cerca del propietario de la entidad; o bien por el silencio del miedo a perder no sé el qué, muy habitual por estos pagos.

 

Las instituciones de la ciudad y el colectivo de las peñas tienen también su parte de culpa. Demasiados años esperando las primeras las migajas en forma de inversión que nunca llegan de Al Thani, porque la inversión nunca fue suya al cien por cien, y las peñas dejándose querer por cuatro entradas de más o de menos, o vete a saber los motivos.

 

Gritar ahora contra Al Thani cuando ya ha hecho el roto es inútil. Los que tienen el poder en la ciudad, grandes empresarios incluidos, deben presionarle para que venda el club -vaya dos oportunidades perdidas este verano-, o bien rezar para que Bluebay le gane el juicio y lo ponga en su sitio.

Y mientras, Casado y sus consejeros deberían obligarle a reforzar esta plantilla o nos iremos a la Segunda División sin remisión. Y ¡ojo!, esto pasará entrene al equipo lo entrene Javi Gracia o Pep Guardiola. De donde no hay nada puede sacarse.