La gran duda de la sala de máquinas del Málaga

El Málaga CF cuenta actualmente con ocho jugadores para su centro del campo. Dos de ellos podrían continuar en dinámica de filial, pero ya son muy reconocidos en el primer equipo blanquiazul: Izan Merino y Aarón Ochoa. Los otros seis mediocentros restantes son: Luismi Sánchez (único fichaje en el medio), Manu Molina, Luca Sangalli, Juanpe, Ramón Enríquez y Dani Lorenzo. El único cambio que ha sufrido el centro del campo ha sido de hombre por hombre. Genaro Rodríguez no recibió oferta de renovación por parte de la dirección deportiva y ha puesto rumbo a Córdoba. Por su parte, su sustituto es un hombre contrastado en la categoría de plata como Luismi. Aún así, esta confección actual deja sus principales incógnitas en el apartado de lesiones. Esa es la gran duda de la sala de máquinas del Málaga.

Manu Molina: número de partidos muy destacable, a pesar de sufrir tres lesiones musculares el pasado curso

En lo referido a los jugadores que el pasado año estaban en la plantilla, comenzamos por Manu Molina. El onubense fue fiable durante la gran parte del año, sobre todo, en la recta final donde se hizo con un puesto fijo en el doble pivote junto a Genaro. Un jugador que durante la temporada ha disputado 32 partidos de Liga (incluido el playoff en este número) y 2 partidos de Copa del Rey. A lo largo del curso se perdió un total de seis partidos por lesión. Un total de tres lesiones sufrió durante la temporada. Las tres por cuestiones musculares.

La primera de ellas se produjo en el mes de octubre. El ex del Ibiza sufrió una rotura parcial miotendinosa en el bíceps femoral de su pierna izquierda. Un problema que le tuvo fuera prácticamente un mes. Coincidiendo, probablemente, con el momento más duro en el apartado de bajas malaguistas durante la temporada. Se perdió los duelos ante Antequera CF, Córdoba CF e Ibiza de la primera vuelta por culpa de esta lesión.

Regresó en noviembre y a las pocas semanas volvió a sufrir una nueva lesión muscular. Esta no le computó tanta pérdida de encuentros porque coincidió con el parón navideño. Un nuevo contratiempo que era difícil de digerir porque estaba empezando a encontrar mejores sensaciones. Una rotura en el vasto externo del cuádriceps de su pierna derecha, le hizo perderse los dos últimos compromisos ligueros de 2023. Los triunfos ante el Mérida y el Algeciras CF.

Le vino bien el parón porque en la segunda parte del curso sí se vio la mejor versión de Manu Molina. Y eso que daba un gran susto durante el partido ante el Ibiza en La Rosaleda. El jugador se tendía sobre el suelo a la hora de partido y empezaba a llorar de forma desconsolada. Se preveía lo peor. Una nueva recaída. Finalmente, esta tercera lesión fue la más leve. Una sobrecarga en el aductor izquierdo hizo que el conjunto blanquiazul fuera previsor con centrocampista y le diera descanso en el encuentro siguiente ante el Atlético Sanluqueño.

Tras ese último problema, el único partido en el que Manu Molina se quedó fuera de la convocatoria fue por acumulación de amarillas. Vio la quinta en la derrota en El Arcángel frente al Córdoba y se perdió el tropiezo en forma de empate ante el Mérida en La Rosaleda.

Luca Sangalli: Un perfil distinto con muchos infortunios

Luca Sangalli ha sido un jugador que siempre ha sufrido mucho a nivel de salud en el mundo del fútbol. Quizá el escenario más duro que le tocó vivir fue el 31 de octubre de 2018. El actual centrocampista del Málaga CF estaba haciendo un examen en la Universidad. Empezó a ver borroso. Le dolía la cabeza y no le funcionaba el brazo izquierdo. Fueron los primeros síntomas que desembocaron en un ictus. Un proceso duro que él mismo trató de normalizar muchas veces, pero que habla de la lucha constante que ha tenido el donostiarra a la hora de gozar de buen estado de salud para la práctica de fútbol.

Lejano ya ese problema, Sangalli sigue siendo un jugador muy propenso a lesionarse. El pasado curso en Primera RFEF sólo disputó 19 partidos con un total de 891 minutos. Se quedó por debajo de la barrera del millar. Una cifra muy corta para un jugador que aterrizaba en Málaga con cartel de Segunda División. En la pasada pretemporada se le vio en un gran estado de forma físico. Parecía que iba a poder dejar atrás el calvario que sufrió en anteriores equipos. Por desgracia blanquiazul se volvió a repetir la historia.

En el mes de octubre sufría una lesión de grado uno en su gemelo interno derecho. En un inicio se preveía un mes de baja. Pero los procesos de recuperación se complicaron y el jugador criado en la Real Sociedad se perdió todo lo que restaba de 2023. No reapareció hasta el año nuevo. Esta lesión le hizo perderse un total de nueve partidos de Liga de la primera vuelta.

Regresó en el nuevo año y se le volvía a ver fresco. El parón de mayor duración parecía haberle sentado bien. Pero, en el día en el que el Málaga CF prácticamente le dijo adiós al ascenso directo perdiendo ante el Castellón en La Rosaleda, Sangalli volvió a lesionarse. En este caso sufrió una lesión en la cabeza larga del bíceps femoral de su pierna izquierda. Un contratiempo que le hizo ser baja en cinco partidos y perderse un mes y medio de competición. Tras ello, es cierto que no volvió a sufrir lesiones, pero nunca llegó a coger el tono físico óptimo.

Dejó para la esperanza, el buen partido realizado en la penúltima jornada ante el Antequera CF donde firmó un gol y también con su buena actuación en Valdebebas ante el Real Madrid Castilla. En los últimos partidos, aunque no formaba parte del once tipo que encontró Pellicer, sí es cierto que terminó con mejores sensaciones. Talento tiene, pero las lesiones deben respetarle para que funcione en Segunda División.

Juanpe: ‘Siamés’ de Sangalli en el tiempo de baja y fuera en 12 partidos por lesión

El ex del Lugo llegaba al Málaga CF también con el grado de la experiencia. Le avalaban sus últimas campañas en el Lugo. Un jugador con bastante recorrido en Segunda División que también ha tenido en la última temporada el talón de Aquiles en sus lesiones. Se perdió 12 partidos por lesión durante la temporada. Nunca tuvo la continuidad física. Por eso nunca ha llegado a ser indiscutible en los esquemas de Pellicer. Empezó con mal pie el curso. En el primer partido ante el Castellón sufrió un golpe que le provocó una rotura del tabique nasal. Eso le hizo perderse el debut del conjunto blanquiazul en La Rosaleda ante el Atlético de Madrid «B».

Una vez superado el episodio de la nariz, sí pudo enlazar minutos entre las Jornadas 3 y 10. Pero noviembre, al igual que con Sangalli, trajo malas noticias. Sufrió una lesión en el aductor izquierdo proximal de grado 1. Esta lesión provocó que fuese baja frente a Córdoba CF, Ibiza, Alcoyano y Real Murcia dentro de la primera vuelta. Después, se perdió también el último partido del año ante el Algeciras por una contusión en la cadera. Después, ya en el mes de enero, una lesión en los isquiotibiales le hizo estar fuera de los duelos ante Castellón, Recreativo Granada, Atlético Baleares, UD Melilla, Recreativo de Huelva y Alcoyano.

Unas nuevas molestias le hicieron perderse el partido ante el Córdoba de la segunda vuelta en El Arcángel. Por desgracia, si echamos la vista atrás, en su temporada previa en el Lugo también tuvo muchos problemas a nivel físico. Un papel a tener que solventar para esta temporada si se quiere contar con él.

Ramón Enríquez: La eterna espera, la misma incógnita

Del trabajo de Ramón Enríquez no se duda. De su calidad, tampoco. Un jugador que se está dejando el alma y que ha hecho multitud de cambios en su cuerpo, para que el físico y las lesiones le respeten. También ha habido serias variaciones en su alimentación. Pero con el de Órgiva hay que tener mucha paciencia. En Primera RFEF apenas ha tenido protagonismo, pero es cierto que el Málaga CF le mimó durante todo el año. Después de su lesión de Lugo que le dejó sin competir durante más de uno año, el centrocampista granadino volvía al verde como solución de emergencia para darle la vuelta a una pésima primera parte ante el Linares Deportivo en La Rosaleda. ‘Doctor Pase’ estuvo a la altura y volvió a ilusionar.

Tras ese partido ante el Linares Deportivo, también se le vio sobre el verde ante Atlético de Madrid «B», Real Murcia y Córdoba CF. Y en un día muy especial, cuando regresaba a la titularidad ante el Mérida, un nuevo paso hacia atrás. Una lesión muscular que ya le alejaría para lo que restaba de temporada. El Málaga CF ha firmado un nuevo acuerdo con él para las dos próximas temporadas que está supeditado a su evolución física. De su calidad no se duda, pero su parte de lesiones en las últimas temporadas hace que el club tenga que ir con pies de plomo con Ramón.

Luismi Sánchez: Viene de una temporada peor en el apartado de lesiones

Luismi es un jugador de mucha experiencia en LaLiga Hypermotion. De la confianza del Real Oviedo. Un año donde las lesiones, sobre todo, de nivel muscular, le han hecho perderse muchos encuentros. A pesar de que fue titular durante la promoción de ascenso hacia Primera División, en la última temporada en el Tartiere sólo ha disputado 20 encuentros de Liga. Menos de la mitad. En Segunda División se disputan un total de 42 jornadas. Una situación de lesiones que no impidió que los ovetenses lucharan por su continuidad y que otros equipos de la categoría, como el Real Zaragoza, se interesaran en su fichaje.

Habrá que ver si se producen nuevas incorporaciones en el centro del campo. Pero existe la gran duda de la sala de máquinas del Málaga.